La política de renovaciones, la intención de incidir en las cesiones y el peso de futbolistas con contrato que no cuentan o no dan la talla descubren que la propiedad del Real Zaragoza mantendrá su línea conservadora sin un proyecto ambicioso de cara a la próxima temporada
Sin la permanencia por consumar por muy próxima que esté más por las señales de desmembramiento deportivo que emiten los cuatro últimos que por los argumentos que expone un Real Zaragoza vaciado de herramientas para conseguirlo por sí mismo (aunque algo tendrá que colaborar), la propiedad va dejando poco a poco avisos de lo que pretende de cara al próximo curso. El principal fue el de su director general, que en recientes declaraciones condicionó el futuro a la respuesta de los abonados, al puesto en la clasificación y el límite salarial que establezca la Liga. Es decir que aunque Juan Carlos Cordero esté trabajando en la configuración de la plantilla, el ejecutivo no podrá concretar operaciones con fundamento como mínimo hasta el mes de mayo. Para esas fechas, por lo general, cualquier club tiene más o menos confeccionado su equipo.
Puede que el Real Zaragoza lo haya hecho ya. La política de renovaciones, la intención de dar continuidad a algunas cesiones y la ambigüedad sobre sus intenciones a medio largo plazo descubren que el fondo de inversión mantendrá unan vez más su línea conservadora sin un proyecto ambicioso de cara a la próxima temporada. Deberá hacer frente a una obligada reforma por la conclusión de los contratos de Ratón y Zapater y las espinosas cláusulas de año condicional que tienen Lluís López (dos), Rebollo (3), Vigaray, Larrazabal y Vada, situaciones en las que sólo el argentino tiene la última palabra. Con Jairo Quinteros, con compromiso hasta 2024, se busca una salida sin que, por ahora, se haya encontrado, mientras que hasta esa misma fecha están vinculados Eugeni, Manu Molina, y Nieto, futbolistas de acompañamiento, y un año más Grau. Igbekeme, cedido al Wisla Cracovia tras una ininteligible renovación antes de irse al Columbus Crew, regresará en junio, al igual que Sabin Merino, a préstamo en el Atlético San Luis y ligado a la entidad hasta 2025. El director deportivo hará frente a una serie de operaciones fatigosas en el caso de rescindir compromisos, lo que supondría desembolsos (alguno importante), u optar por la vía de nuevas cesiones.
Antes de entrar dejen salir. Bajo esa premisa, la morosidad puede dominar los tiempos y afectar a la remodelación o lavado de cara dependiendo del contexto final. Se quiere prolongar la sinergia con Giuliano y es posible que con Mollejo, ambos del Atlético, con Fuentes y Alarcón no se ejecutará o solicitará continuidad alguna mientras que Bebé regresará a la disciplina del Rayo Vallecano. El caso de Makhtar Gueye traerá cola cuando se destape la letra pequeña de su contrato. Sanllehí insiste que la opción de compra existente sólo se realizará en caso de ascenso (tres millones), pero lo cierto es que el fondo de inversión tiene apalabrado su fichaje (dos millones). La cuestión es descubrir cuál será el destino final del senegalés, sin descartar que siga en La Romareda. En esta campaña en marcha de todas incorporaciones sólo han tenido cierta notoriedad Simeone, asumiendo con carácter una responsabilidad que no le correspondía y que está acusando, y Bebé a ráfagas, avalado por su violento disparo y una calidad técnica de superior categoría.
La prolongación y mejora de contratos Francés, Azón, Francho y no tanto de Puche era una obligación deportiva y moral de los nuevos dueños, que los han utilizado de bandera sin entregarles apenas armas para la batalla. Fundamentales los tres primeros para salvar al equipo del descenso en dos ocasiones, su continuidad era una cuestión de ética y de aprovechamiento de sus valores canteranos. Firmados hasta 2025, su pasión y compromiso en esta sucesión de guerras por la permanencia les ha pasado factura, porque sin restarles ningún mérito, la realidad es que dentro de un conjunto tan exento de calidad su proceso de crecimiento se ha estacando al estar sujeto a un ecosistema tan pobre de aprendizaje. A ellos se han unido el vigoroso Marcos Luna hasta 2026 y un Marc Aguado (2025) de estupendo rendimiento en el Andorra después de que hayan rubricado también este ejercicio Cristian (2024), Gámez (2024), Bermejo (2025) y Jair (2025), este ha firmado este mismo martes por la tarde. El portero continúa siendo una garantía a sus 36 años y el central, a punto de cumplir los 34, es un defensa poderoso y disciplinado a quien se le han admitido dos años más y una nómina alta que podrían cuestionarse en un marco de cambio hacia algo diferente y mejor. Lo del centrocampista es otra cuestión insondable para la razón, un jugador fijo con los entrenadores y que aporta muy poca sustancia al fútbol efectivo.
Con este panorama por delante, por la ventana de verano entra un porvenir bastante frío, lejos de la temperatura que reclama un equipo con aspiraciones de ascenso o por luchar estar cerca de él. A la espera de acontecimientos financieros favorables que reclama Sanllehí sin aludir al compromiso deportivo del grupo al que representa, la consiguiente tardanza que supondrá la espera y que Cordero sea capaz de precisar en las entradas y en las salidas con la obligación de acertar de una vez por todas con el delantero diferencial, el Real Zaragoza del futuro se parece demasiado al del presente, que aún está pendiente de confirmar la salvación o de que le echen una mano el resto.
Felicidades por los lectores de Príncipe de París.
Que sigan creciendo en número y participación.
Un abrazo.
Gracias Luis
Pues sabe que nos las pone bien Don Alfonso, todavía no estamos seguro en segunda,aunque le llevamos 6 puntos a la Ponfe, y dice vd que para la tan traída y llevada temporada 2023-24, que decían lo de 14 fichajes nada de nada, entonces para que se fichó JOSE ANTONIO CORDERO, no entiendo nada la verdad, el catalán que pita RAUL, que no acierta ni una, el JORGE MAS, en MIAMI y nuestro REAL ZARAGOZA, al borde del descenso, y una pregunta que me ahogo yo, estos señores han venido aquí a por el negocio del estadio, bien y si ahora no se hace, estos señores que se irán y nos dejarán tirado , nuestro REAL ZARAGOZA, entonces desaparecerá porque estos señores han venido a explotar el estadio y sacar negocio de ello y porsupuesto sacar pasta más claro agua y le importa un pimiento al Real Zaragoza, yo por lo menos lo veo así. Y el catalán Raul exigiendo, y el que hace nada, diciendo al boletín oficial que tenemos que tener unos 26.000 abonados, para hacer los fichajes y según en el puesto que termine el equipo, menudo panorama se nos presenta y así creo que no ascenderemos nunca, así lo veo así opino . Y enhorabuena al señor HERNANDEZ porque cada ve la gente los ZARAGOCISTAS leen sus artículos porque usted va al grano y le cuenta las cuarenta al que se lo merece y yo le aplaudo por ello y por tenernos informados .
A la vista de lo que ha hecho en 1 año la nueva propiedad y directivos, no se puede esperar nada bueno de ellos. Descaradamente, se nota que ha venido a hacer negocio con la remodelación de la Romareda y les importa un pimiento todo lo demás. Así que a los desengañados aficionados de pro, que no nos intenten vender mas patos porque ya tenemos el estanque demasiado lleno.