El turco, un experimentado ariete sin grandes números anotadores en destinos intermedios, ha sido acogido en el Real Zaragoza con todos los honores y la ficha más generosa de la platilla, 800.000 euros por año, bajo el presagio de que mejore y explote sus cualidades de delantero relevante
Ver a Sinan Bakis en un buen día del turco es disfrutar de un delantero centro muy apreciable. Goles rotundos con ambas piernas desde el balcón del área, bombazos en carrera en dirección a lugares impensables para los guardametas, un físico recio y un agudo olfato de oportunista depredador para resolver cerca de la portería. Posee, además, un variado catálogo de atacante moderno con un juego de espaldas que le permite acudir a la gestación de la jugada y actuar de amable socio cerca de la terminación. Juan Carlos Cordero lo ha apostado casi todo a quien debería dinamitar el terrible pasado reciente de un equipo descamisado en labores ofensivas, refugiado en Azón y Giuliano y sus espíritus combatientes para evitar la desastrosa elección de los arietes principales. Pero, ¿cuántos de esos buenos días tendrá Bakis para, como ha anunciado Marc Aguado, enamorar a La Romareda? Es una incógnita por despejar a nivel individual por parte de un finalizador sin grandes números en su carrera y por la colaboración que pueda recibir de un conjunto aún en elaboración para ser lo que el director deportivo y la afición esperan.
Con 29 años, ha sumado 12 goles como mejor registro en su dilatada y algo desdibujada trayectoria, por lo general en la élite de destinos menores. La última docena, en el singular Andorra de Eder Sarabia, compartiendo la titularidad e inspiración realizadora con Carlos Martínez (9 goles), ha realzado su figura, sobre todo por su capacidad de activación con una estimable media de 178 minutos de gol a gol entre los 22 encuentros que ha figurado en el once inicial y los 11 en los que ha comenzado en el banquillo: como suplente ha salido para firmar cuatro dianas contra Albacete, Mirandés, Oviedo e Ibiza. Su tercera posición como máximo artillero de Segunda por detrás de Uzuni (23 con el Granada) y Raúl García (19 con el Mirandés) y con su relación con el conjunto del Principado a punto de expirar, le posicionaron en el escaparate para dar un salto que el turco confiaba que fuera a Primera y que se ha resuelto con un contrato hasta 2026 con el Real Zaragoza y su generosa nómina de 800.000 euros, la más alta de la plantilla.
La buena pinta del turco en la que podría ser la cima de su madurez y su eclosión definitiva hacia cifras más llamativas, ha desatado la expectación por hallar por fin un referente puntual en ataque desde el colombiano Luis Suárez. Bakis, nacido en Troisdorf (Alemania), se formó en el Bayer Leverkusen, pero no halló espacio en el primer equipo y comenzó a emigrar por ligas intermedias, campeonatos como el turco y el holandés. En el Kayserispor, con tan sólo 19 años, consumió su primera temporada (2013-2014) sin apenas relevancia en las alineaciones. En las dos siguientes, entre liga y copa, marcó tres en copa y se quedó en blanco en liga, mientras que en su último curso sumó 11 (3 y 8) entre liga y copa. Menos fructífero fue su paso por el Bursaspor, donde llegó libre e hizo un par de tantos en dos campañas, para desquitarse en cierta forma con los 5 y sobre todo los 12 que rubricó en el Admira Wacker de la Bundesliga austriaca. Diez goles en su debut en el Heracles de la Eridivise y seis más en su segundo capítulo en Holanda la abrieron las puertas del fútbol español, de un Andorra recién ascendido a Segunda.
No ha sido un matador en estos diez años. Sin embargo, hay algo en Sinan Bakis que le dice a Cordero y a otros ejecutivos que han perseguido su fichaje que bajo esa capa de delantero sin guarismos deslumbrantes está a punto de despertar un futbolista decisorio, bastante más de lo que ha sido hasta el momento. El Real Zaragoza necesita que el punta turco, no exento en su juego de la dependencia del suministro de otros compañeros, presente la mejor versión de su larga ruta deportiva. Por ahora es un corazonada, un presagio de que bajo esa piel de lobo hay un lobo auténtico y constante para liderar a la manada de Fran Escribá.
SINAN BAKIS, primer turco en la historia zaragocista, tiene 29 años, ha marcado 12 goles la temporada pasada , creo que va ser el jugador que más cobra, pero todo el mundo tiene una fe, insólita en el turco , el porque no lo sé, todos hablan muy bien del chico, que va bien con las dos piernas, que le pega al Balón muy bien y con mucha fuerza, yo he apostado sin conocerlo que va a marcar este año 15 goles como BLANQUILLO, también hablado muy bien XAVI AGUADO, que lo vio el año pasado muchos partidos y que parte de culpa que este aquí, la tiene su hijo MARC AGUADO, del que también la afición ZARAGOCISTA espera mucho de él hijo de XAVI AGUADO . ESPEREMOS LO MEJOR DEL TURCO Y
DEL CANTERANO .