La Dana ha vuelto a causar dolor, pérdidas económicas y los titulares en los medios de nuestro país como antes los incendios en la península y Canarias. El viaje para el cariñoso encuentro de la Vicepresidente del Gobierno y el prófugo perseguido por la Justicia española por desobediencia y malversación -aunque ya no esté acusado de sedición- se había agigantado en la sociedad cabizbaja de un país vacunado contra la sorpresa. Por eso vuelve a la palestra Jenni con su denuncia contra Rubiales presentada ayer en la Fiscalía y se toca el tema de Enríquez Negreira; eso sí, con mucho tacto al ser la Guardia Civil quien investiga el caso. Se asomó poco el tricornio en las televisiones porque el Barça es Cataluña y la Benemérita fue retirada de sus labores en esa Comunidad. Por si acaso ya se emitieron el mismo día de su muerte programas especiales de María Teresa Campos que revolucionó la televisión con su personalidad y exigencia en tiempos peores para la mujer.
Tuve la fortuna de trabajar unos meses con ella en 1981 cuando era jefa de informativos de Radiocadena Española y directora del matinal. Allí estábamos dos jovenzanos como el también fallecido Chema Abad y yo hablando de deportes según el turno que llevásemos en la Voz de Madrid. Con autoridad, seriedad y criterio pasaba revista de lo que se iba a decir en el programa y nadie dudaba de su liderazgo.
Mientras tanto, en Zaragoza, estamos en la burbuja del éxito aunque sea en Segunda y con la undécima temporada arrancando nuestra piel a tiras. Con miedo a que estalle algunos, con fe ciega sobre la seguridad del ascenso otros y a la expectativa la mayoría. Los datos arrojan un balance positivo en cuanto a números, plantilla, inversión y abonados. Por el contrario, Paco Belmonte, periodista, director deportivo y presidente del Cartagena, llamó payasos a sus críticos el martes en una rueda de prensa. Se conoce que parte de la afición y de los medios locales no están satisfechos con el club murciano. ¿Beneficiará este ambiente al Real Zaragoza? Conviene sacar partido de todo, incluso de las peleas en el barro.