El Real Zaragoza, obligado a ganar, se enfrenta al conjunto canario en su estadio, donde solo ha perdido en casa con uno de los nueve primeros, el Girona. En su estadio han caído Espanyol, Almería, Leganés y Sporting y han empatado Rayo y Mallorca
Después de abrazo del sábado en La Romareda, donde el Real Zaragoza y el Espanyol acordaron que el empate era estupendo para sus diferentes objetivos, el conjunto aragonés visitará la próxima jornada al Las Palmas, un rival liberado de todo tipo de presiones competitivas. Tampoco se jugaban mucho los canarios contra el Alcorcón y sin embargo arrancaron un empate sin goles frente a los alfareros, lo que debería servir como aviso de que piensa regalar más bien poco. ¿Se relajará porque sí frente al equipo de Juan Ignacio Martínez en el cuarto estadio más complicado para los visitantes después de los de Espanyol, Leganés y Mallorca? La escuadra que entrena Pepe Mel solo se ha visto superada en el Gran Canaria por Oviedo, Mirandés, Sabadell y Girona. Dicho de otra manera, de los 9 primeros clasificados, el único capaz de ganarle en su campo ha sido el cuadro catalán. Almería, Sporting, Espanyol, Leganés y Ponferradina han mordido el polvo, mientras que Fuenlabrada, Rayo y Mallorca han sacado un empate. En su búnker ha marcado 31 goles, la segunda cifra más alta del campeonato como local después del Espanyol.
El Real Zaragoza necesita los tres puntos en este desplazamiento. No puede consentirse otro marcador porque llegar bajo una presión absoluta a su partido con un Castellón que vendrá al Municipal para vencer o morir, podría jugarle una mala pasada. Si alguien piensa que el Las Palmas podría levantar el pie del acelerador, también tendrá que contar que quizás haga lo mismo ante Alcorcón y Logroñés, otros dos implicados en el descenso que le restan en el calendario. El equipo de JIM depende de sí mismo, uno de los factores clave en esta angustiosa recta final que se ha torcido desde la igualada en el Anxo Carro. En la peor recha de resultados desde que el entrenador alicantino se sienta en el banquillo (cuatro encuentros sin ganar), el Real Zaragoza afronta además otro de sus grandes retos, vencer fuera (los otros son el gol y su incapacidad para remontar). En todo el curso lo ha hecho en Málaga y Fuenlabrada (lo de Alcorcón fue cosa de los despachos), por lo que deberá esmerarse al máximo para asaltar la muralla amarilla. Abróchense los cinturones para este vuelo.
