Víctor Fernández ha heredado la maldición que ya sufrieron Fran Escribá y Julio Velázquez. Al parón obligado e indefinido de Francho Serrano por una fascitis plantar que venía dándole guerra desde hace tiempo, noticia que se confirmó ayer con la intención de que la dolencia del centrocampista no se agrave aún más, se ha unido la baja de Mollejo por una rotura muscular a nivel del recto anterior del cuádriceps derecho, lesión que sufrió al final del ensayo del jueves y que se ha confirmado esta misma mañana. Son ausencias de dos titulares, del «motor» del equipo, como lo define el técnico en la rueda de prensa previa al partido de Anduva, y de del atacante cedido por el Atlético, quien es el segundo máximo goleador con cuatro tantos. «Comentó que fue un pinchazo, algo que no le había ocurrido nunca en su carrera en su etapa formativa ni en la profesional», ha desvelado el entrenador, que califica estos acontecimientos imprevistos como «una putada. Nos desnuda cuando más necesario era que nos abrigáramos». Víctor, sin embargo, dijo disponer de herramientas como dar la cara frente al Mirandés, un partido en el que tampoco podrá contar con un Francés que se encuentra concentrado con la selección sub 21. Esta tesitura obligará a buscar soluciones en cada línea de un conjunto tocado que afronta una jornada complicada por su situación en la tabla, pendiente de confirmar la permanencia aunque el objetivo no parezca complicado en la once encuentros que restan.
Adrián Liso, que debutó ante el Espanyol, será el gran beneficiado en una alineación en la que habrá que improvisar en cierta medida. Víctor Fernández no adelantó nada respecto a sus planes, pero de su elogios hacia el punta juvenil y por la zona que hay que cubrir y que había entregado a Mollejo, el extremo apunta a ser fijo en el once. La parte de arriba recibe en la convocatoria a Pau Sans «para jugar», aunque partiendo desde el banquillo. «Nunca llevo a un futbolista del filial para completar. Si va es porque está en disposición de participar». Otra vez los chicos al rescate, algo que no es nuevo en la historia reciente del Real Zaragoza. «Son gente rápida, joven y pícara». Más abierta queda la defensa. «Sería de imbéciles no reconocer que no echamos de menos a Francés, que estuvo espectacular el otro día en su mejor actuación de la temporada, pero no me preocupa porque quien ocupe su lugar lo hará bien», explica el entrenador. Ese puesto puede ser para Lluís López, «inteligente y con buena salida de balón», o Mouriño, a quien Víctor posiblemente mantenga de lateral convencido de que el uruguayo está igual de cualificado para actuar en el eje o en el carril. Al igual que con el grupo, destaca el «notable rendimiento» del charrúa frente a los pericos en la segunda parte.
Aguado tiene más posibilidades que Grau para hacerse cargo de una labor para la que estaba predestinado sin que el jugador haya estado a la altura esperada y que Víctor dejó en la suplencia en su reestreno. Sin Francho, el Real Zaragoza pierde piernas y dinamismo, y en el catálogo de centrocampistas no tiene relevo. Sin cambiar de dibujo, el conjunto aragonés se achatará algo para protegerse sin perder la identidad más desenfadada que quiere imbuirle Víctor Fernández para un partido «que necesitamos sumar y cuanto antes». Una de las grandes apuestas del técnico en su puesta de largo en La Romareda fue recuperar a Bakis pese a que el turco está justo hasta para entrar en la lista. La idea es recuperarle en marcha desde el principio de los partidos, por lo que volverá a ser la referencia ofensiva. «Debe ser un jugador importante para nosotros y voy a ayudarle a que dé ese pasito». Del Mirandés, Víctor descubre lo sabido. Un equipo frágil atrás con mucho gol en casa que le convierte en una amenaza por el descaro de todos sus integrantes en general y de Carlos Martín, con 13 goles, en particular. «Hay que ganar, y si no se puede, empatar. Tenemos que pasar de la ilusión a los triunfos».
Da vértigo mirar a estas horas la clasificación, quizá tengamos que arrepentirnos de no haber despedido antes al vendedor de enciclopedias usadas, por cierto que no interactuó con los aficionados en su despedida, mañana es el día de los JUGADORES ya no sirven excusas ni discursos vacíos, por cierto observar la cara del lateral izquierdo francés en la rueda de prensa de prestaciones de 50 minutos de uso y cada 15 días «pulpo en garage», mañana esfuerzo, garra, entrega y profesionalidad, cuidado ya hemos vivido Llagosteras.