El Real Zaragoza debe sumar puntos contra los dos primeros clasificados para suavizar una segunda vuelta ya de por sí inclemente
Con 17 puntos, los que tiene en estos momentos, el Real Zaragoza puede enfrentarse a una segunda vuelta de desniveles inhumanos Las dos últimas jornadas de primera ronda le han emparejado a un par de equipos que en estas fechas ocupan la segunda posición, el Las Palmas, y la primera, el Racing. Su necesidad alcanza cotas tan elevadas que no puede contemplar esos encuentros en función de las grandes distancias que le separan a todos los niveles de ambos. Tendrá que tratarlos de igual a igual y, lo más importante, sumar puntos, a ser posible por el conducto de la victoria. A las sensaciones, la fe y el crecimiento que ha experimentado a través de su espíritu insurrecto contra la derrota deberá añadir el o los triunfos. Si consigue hacer una buena caja, su tortuoso camino hacia la salvación se suavizará un poco; si se va de vacío, se enfrentará al reto colosal de ganar alrededor de 11 de los 21 partidos restantes hasta el ocaso del torneo. De la horquilla de 17 a 23 puntos hay un mundo por ínfimo que parezca en la calculadora.
El conjunto canario, que visita el domingo 4 de enero el Ibercaja Estadio, es casi invencible a domicilio. Sólo ha perdido en Castellón (1-0), pero tampoco se prodiga en ganar con tres victorias y cinco empates. Sus contrastes goleadores son notables: mientras que es el que mejor defiende su portería con cuatro tantos encajados, marcar es un ejercicio que se le atraganta hasta tal punto que sólo ha hecho siete dianas, igual que el Málaga y dos menos que el Éibar. Por contra, el Racing en El Sardinero, campo al que acudirá el Real Zaragoza el sábado 10 de enero, dispone de su gran fortaleza. El líder cayó con la Cultural Leonesa (2-4) y el Andorra (1-2), dos ascendidos, pero mantiene el pulso firme frente a su afición sobre todo por su deslumbrante capacidad realizadora del equipo cántabro como local que se traduce en 23 tantos, aunque asuma una cantidad en contra bastante elevada, 12, fruto de su profunda naturaleza ofensiva.
El equipo de Rubén Sellés lleva dos puntos de nueve en sus últimos compromisos, fruto de su insistencia hasta el último suspiro. Dani Gómez firmó de penalti el empate en el minuto 95 en La Rosaleda y Sinan Bakis evitó la derrota contra el Burgos en el 92. Cinco jornadas consecutivas a remolque, con remontadas completas en Éibar y frente al Leganés. Las Palmas y Racing son los rivales de más alta exigencia antes de cruzar el ecuador de la competición, equipos a los que concederles una ventaja puede resultar letal y que difícilmente se dejen sorprender cuando cae el telón. De esos resultados y sus formas depende más de lo que parece el destino aun así inclemente del Real Zaragoza, obligado en todo caso a una respuesta de playoff.

