El verdadero conflicto del ‘derbi’

Significado de derbi según la RAE: «Encuentro deportivo de rivalidad local o regional, generalmente futbolístico; también se aplica a determinados encuentros de máxima rivalidad, aunque no sea local o regional». ¿Es entonces el partido del lunes entre el Real Zaragoza y el Huesca un derbi». Sí si nos ceñimos escrupulosamente a la definición oficial del término ya que los dos clubes pertenecen a la misma región y comunidad, pero no se recoge en la explicación qué punto de rivalidad es necesario para otorgarle categoría de derbi. La historia de enfrentamientos entre ambos equipos se reduce a 16 partidos dentro del marco del fútbol profesional, por lo que en el marco deportivo ese hipotética enemistad queda reducida a la mínima expresión. Han sido confrontaciones aisladas que se han sucedido con asiduidad en el siglo XXI cuando ambos han coincidido en Segunda División. Es cierto que sí hubo cierta beligerancia por cuestiones puntuales cuando en sus orígenes militaban en categoría regionales y ni siquiera se denominaban como en la actualidad. Bautizados como Real Zaragoza (1932) y SD Huesca (1960), los duelos adquirieron una tonalidad si no fraternal sí dentro de una atmósfera cordial.

El debate se ciñe a la interpretación que se le quiera dar. No es una cuestión de menosprecio por ninguna de las partes ni de comparativas. Ahora bien, la tensión ha subido algunos grados en los últimos tiempos no tanto por la tirantez y la mofa siempre vigente entre las ciudades, sino por la intervención de personajes que han trasladado sus frustraciones personales al ámbito deportivo, además de la irrupción de los grupos ultra como equívoco elemento de un careo general inexistente. Hablamos, sin duda, de un partido especial por lo que tiene de complicidad social y cultural, trascendencia aumentada por la prensa con un tratamiento más amplio y desarrollado sobre el acontecimiento. La supremacía futbolística tampoco entra en juego puesto que el Real Zaragoza está muy por encima del Huesca aunque los altoaragoneses hayan realizado una gestión magnífica en los últimos tiempos que les ha permitido igualar y superar en categoría y clasificaciones a un Real Zaragoza en muy bajas horas económicas.

Aunque la RAE lo admita, resulta muy difícil, desde una perspectiva purista, dar a estos encuentros denominación de derbis con todo lo que ello implica. Principalmente por su escaso poso histórico, lo que minimiza la rivalidad al no existir continuidad, y por desarrollarse en contextos competitivos alejados de la élite. Real Madrid-Barcelona, Real Sporting de Gijón-Real Oviedo, Liverpool-Manchester United, Liverpool-Everton, Celtic-Rangers, Arsenal, Tottenham, Athletic-Real Sociedad, Betis-Sevilla, Inter-Juventus, Corinthians–Palmeiras, Bayern Múnich-Borussia Dortmund, Olympiacos-Panathinaikos, Boca-River, Ajax- Feyenoord, Dinamo Zagreb-Hajduk Split, Oporto-Benfica, Spartak Moscú-Dinamo Kiev, Roma-Lazio, Juventus-Torino, Nacional-Peñarol, Fenerhbace-Galatasaray, Chelsea-Tottenham… Calificar el Real Zaragoza-Huesca como un derbi no es un error según la RAE, pero en el diccionario del fútbol no tiene cabida como tal.

02 comments on “El verdadero conflicto del ‘derbi’

  • Félix , Direct link to comment

    No lo considero Derbi por una razón de peso…son dos equipos que han militado casi toda su existencia en categorias diferentes. Pero el choque de lunes es especial porque hay deudas pendientes…todavía colea el último partido en la Romareda en ese minuto 95 en el que Pulido hace falta a Puado que el colegiado no pitó lo que suponía la expulsión del defensa al ser el último defensor. Tampoco hay que olvidar que hay un personaje en la Federación que es de por esos lares que ha perjudicado al R. Zaragoza siempre que ha podido. No, no es un Derbi, sino una oportunidad para dejar las cosas en su sitio.

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