Alabado sea Dios

Cristian Álvarez, tras superar su lesión, regresa a los ensayos para jugar contra el Eibar y evita la tensión en una portería en la que Poussin ha quedado muy señalado en dos partidos donde fue desgraciado protagonista

Ver de vuelta a Cristian es una noticia que ciega de alegría y, sobre todo, paz espiritual y deportiva, más aún después de que el segundo portero, Poussin, cogiera su testigo para ser desgraciado protagonista en los encuentros fentre a Alcorcón y Sporting. El arquero argentino, que se retiró en la recta final del partido en Andorra tras diagnosticarse a sí mismo una pequeña rotura muscular confirmada con posterioridad por las pruebas médicas, se ha entrenado esta mañana con sus compañeros y, salvo nueva orden o contratiempo, apunta a jugar este sábado frente al Eibar. Ausente en esas dos citas, la nostalgia se transformó en pánico tras los errores del cancerbero francés y la posibilidad de que volviera a repetir en el puesto en esta cita contra los armeros. Pero el capitán y valor más importante del equipo evitará que se viva tensión e incertidumbre alguna en un pulso fundamental para que el Real Zaragoza se mantenga dentro de la zona de promoción de ascenso.

Asimismo, Lecoeuche, reincidente en lesiones y molestias musculares, y Marc Aguado también han trabajado en una primera fase del entrenamiento para después someterse ambos a ejercicios específicos. Parece muy factible que el lateral francés entre en la citación frente a los armeros, mientras que con Aguado, quien se retiró en El Molinón por una dolencia, es posible que se sea más cauto pese a que el futbolista, pieza clave en el sistema que mejor interpreta el conjunto aragonés, haya dejado constancia de que su deseo es estar presente este sábado en La Romareda.

Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *