Dos jabatos zaragozanos en el Mirandés

Roberto López y Raúl Parra, jugadores con origen en el fútbol clubes del fútbol base aragonés y con experiencia en Primera, son fijos en los planes de Joseba Etxeberria

Tienen casi la misma edad, 22 y 23, son de Zaragoza, se formaron en el fútbol base aragonés (pertenecieron al Amistad), emigraron muy jóvenes en busca de fortuna, han disputado partidos en Primera y ahora están cedidos en el Mirandés, con el que el Real Zaragoza se mide mañana en Anduva (16.15). Roberto López, centrocampista de la Real Sociedad, llamó la atención de un buen número de clubes y eligió Zubieta siendo cadete, y Raúl Parra, lateral derecho, formó parte de la cantera zaragocista, para luego pasar por el Amistad, el Juventud, el Olivar, el Guijuelo en Segunda B y la estructura del Cádiz, donde el año pasado combinó el filial con apariciones en el primer equipo en seis ocasiones, cuatro partidos de Copa y uno en el Camp Nou de Liga con debut más que notable y victoria ante el Barça.

Roberto López tenía una mayor proyección y más cartel por su elegancia y sus buenos conceptos de llegador. Habitual en las categorías inferiores de la selección española, donde llegó a estar en una citación en la sub 21 de Luis de la Fuente con Francho, Azón y Francés, cogió carrerilla desde el Sanse de la mano de Imanol Alguacil, quien le abrió la puerta de la Real en la élite. La tremenda competencia en la medular donostiarra, y pese a hacer goles con los de Anoeta, le devolvió al filial y esta temporada ha hecho las maletas en dirección a Miranda de Ebro. Parra, un tallo de 1,87 metros de altura, un defensa sobrio y solidario, siguió un camino más humilde. Ambos son fijos para Joseba Etxeberria en un Mirandés donde buscan una nueva oportunidad para seguir sumando experiencia y reivindicarse como futbolistas aptos para Real Sociedad y Cádiz.