Empieza la cuenta atrás para reforzar la plantilla. La derrota de este lunes en Butarque ha ratificado la inconsistencia de una plantilla que venía defectuosa de fábrica y que ningún entrenador va a mejorar sustancialmente por sí mismo. Se podrá estar un tiempo sin perder, como ha ocurrido, e incluso lograr alguna victoria aparatosa, como sucedió ante el Huesca, pero la primera vuelta ha ejercido de juez implacable para destapar todas las verdades de un Real Zaragoza vulgar hasta la médula que ha ganado seis partidos, ninguno de ellos contra los nueve primeros clasificados, y que ha perdido con dos dos colistas, Mirandés y Racing, empatado con otro, Málaga, y vencido a uno, el Ibiza después de remontar en el minuto 91 un gol de los isleños. Por el camino ha dejado una deshonrosa derrota en Copa ante el amateur Diocesano.
Los 25 puntos sumados le mantienen a salvo, por el momento, de una situación crítica. A cuatro del descenso, ha cumplido con la media de la salvación al pasar el ecuador del campeonato, lo que debe considerarse un éxito por el rendimiento ofrecido. A menos de dos semanas de que se abran las puertas del mercado de enero, Escribá va a mantener reuniones con la secretaría técnica, según dijo, para exponer las necesidades del equipo. El gran dilema es quien o quiénes componen ese órgano, porque el despacho del director deportivo sigue vacío y Sanllehí, la figura sobre la que orbita el todo y la nada, no es precisamente un sabio del fútbol rodado. Se desconoce por completo a estas horas en qué manos está el Real Zaragoza, lo que añade una enorme carga de incertidumbre a la que ya de por sí transmite el vestuario.
Los deseos que se han colgado del árbol de Navidad son variados y se centran en algunas posiciones concretas como el eje defensivo, el puesto del mando del centro del campo y la torreta del goleador. Tres o cuatro futbolistas si se suma algún extremo que dotarían al grupo de mayor competitividad. La cuestión es de dónde van a salir, y la única respuesta cierta apunta a las sinergias directa o indirecta en forma de cesiones. Fuentes, Gueye, Quinteros… Mollejo. Con estos precedentes y el vacío ejecutivo existente es para echarse a temblar por mucho que las peticiones de Escribá sean razonables y seguramente exigentes. El Real Zaragoza puede salir peor parado de esta ventana que la del verano, primero porque es un espacio muy tramposo donde abundan la bisutería y los retales y segundo porque los fichajes podrían ejecutarse muy a ciegas, por consejos de terceros interesados.
Jorge Mas en su última visita a la capital aragonesa con motivo de la Junta General, dijo que se producirían una o dos adquisiciones más y que el gran desembolso se producirá la próxima temporada. O el presidente está desubicado por completo dentro de la propiedad o dispone de la información exacta. Según el comportamiento de los nuevos dueños hasta el momento, todo indica que el magnate estadounidense no habla por hablar. Ahora bien, con tan sólo un par de contrataciones el Real Zaragoza va a jugar la segunda vuelta para salvarse. Y si no lo hiciese, el proyecto a medio-largo plazo de ascenso a Primera habría que reiniciarlo desde Primera RFEF. Es lo que ocurre cuando juegas con el diablo tan cerca del infierno.
Foto: Real Zaragoza / Tino Gil
La incongruencia total en nuestra entidad el mister cree que hacen falta por lo menos tres fichajes, un central , e incluso cuatros, un centrocampista , un jugador de banda y por supuesto un goleador, el que pone las pelas, el cubano norteamericano JORGE MAS, dice que si acaso un fichaje, quien entiende esto, para más colmo no tenemos director deportivo, y el señor MAS lo deja todo para la temporada 2023-24, ustedes señoras y señores entienden algo, cuando vamos a cumplir trece años consecutivos en segunda y sin saber como vamos a quedar en esta temporada 2022-2023 , realmente esto es una INCONGRUENCIA otras de las muchas que comete nuestra entidad .