El conjunto aragonés, que vuelve a fallar en casa, muestra una incapacidad sublime de sus jugadores y su entrenador para ganar a un Málaga más adulto que jugó con diez desde la primera parte (0-0)
El Málaga jugó al fútbol con once y con diez desde la primera parte por expulsión de Kevin Medina revisada por el colegiado y el Real Zaragoza jugó al balón como un equipo malo en su concepción táctica y en la intervención de todos sus componentes, incapaces de imprimir el ritmo adecuado en superioridad y absolutamente minimizado por un rival más maduro en todos los sentidos, sobre todo, por obligación, en el defensivo. El conjunto de Víctor Fernández volvió a fallar en La Romareda, carente de calidad colectiva e individual, atropellado por las prisas y lo plomizo en unas transiciones siempre con el foco por dentro para comodidad de un especialista en la contención. Sergio Pellicer fue un entrenador reflexivo en una situación límite y Víctor Fernández un alineador tarambana, de esos prendados de sus favoritos como Ares, titular en lugar de Liso, y Aketxe, omnipresente en ninguna parte. Al extremo cedido por el Athletic hubo que quitarle del campo por inoperante y bajo el riesgo de que viera la segunda amarilla, y el ex del Éibar deambuló por todas las posiciones –sólo le faltó actuar de líbero– como moroso director de una orquesta sin músicos. El desastre, como mal menor, acabó en un empate que deja al Real Zaragoza en la sexta posición cuando aspiraba a la segunda en lo que supone la confirmación de una caída progresiva desde hace once jornadas: en este tramo de la competición suma 14 puntos de 33 posibles… No hay más preguntas, señoría.
Su primer empate en casa y la primera ocasión que no marca ante su afición fueron consecuencia de una realidad cada día más palpable: es un equipo mal construido y mal dirigido que sigue aún entre los seis mejores gracias a muchos jugadores que no estaban invitados a la fiesta y que le han dado una valiosa transfusión, caso de Iván Azón, quien esta vez no vio portería. También Francho y Sans, este de nuevo en el once pero anulado por un sistema sin gobierno, sin velocidad ni sorpresa por fuera. Remontadas agónicas, derrotas contra adversarios de mayor envergadura competitiva y algún triunfo meritorio le tienen tan cerca del ascenso directo como del abismo de la mediocridad. En cuanto se le planta un adversario de pelo en pecho aun amputado por una tarjeta roja y con medio partido por delante, el Real Zaragoza acusa un enorme infantilismo. Imberbe en defensa, con acné juvenil en el centro del campo y recurriendo en ataque al hermano mayor, a Azón, como única amenaza. Además, Víctor Fernández promovió esa adolescencia con decisiones entre el capricho y la improvisación. Luna de 7, Marí para ensombrecer a Azón y Bermejo saliendo en el minuto 95 con cara de póker. El Málaga plantó los pies en el suelo desde el principio y obligó a Poussin a dos intervenciones majestuosas, una a lanzamiento de Larrubia y otra tras un disparo de Manu Molina. Más pronto que tarde pintaba a derrota segura, pero Kevin disputó con Aguado un balón dividido por abajo y el árbitro consideró que lo hizo con una dureza excesiva. Ese castigo parecía llevar el encuentro a un desenlace feliz, pero la pesadilla continuó.
El Málaga no dio un paso atrás en su fuerte personalidad. Lo hizo para contener la hipotética tromba que se le podía venir encima. En la segunda parte, Moya entró por Aguado y Liso recuperó el puesto que le fue arrebatado. El primero colaboró a ralentizar el juego en lugar de imprimir una circulación ágil y el canterano apenas intervino frente a una muralla inteligente, ganadora. Un centro del propio Moya dejó a Azón sólo ante Alfonso Herrero, pero el punta dirigió mal un cabezazo con todo a favor. Luna enganchó un rechace a un palmo de Herrero y el portero lo sacó con los pies. No sufrió más el conjunto andaluz frente a un Real Zaragoza decepcionante en el que los fichajes de Fernández y Cordero chirrían en cada jornada. Ares, Aketxe, Marí, Kosa, Clemente, Gori, un Vital del nivel inestable de Lluís López… Las bajas de Bazdar, Soberón y Keidi Bare retumban, pero lo verdaderamente atronador es la impotencia para llevarse un partido contra diez. La canción del mercado de invierno va a sonar en todas las emisoras. Víctor ya ha sintonizado la suya pidiendo refuerzos. Qué balada tan triste y recurrente de alguien que vino para llevar al Real Zaragoza al ascenso con su influyente e insobornable carácter y ahora se lamenta de su propia obra incompleta. Bermejo en el 95… El imperio de lo ridículo.
Real Zaragoza 0. Poussin; Calero (Bermejo, minuto 95), Lluis López, Vital y Tasende; Aketxe, Marc Aguado (Toni Moya, minuto 46), Francho Serrano (Marí, minuto 75) y Adu Ares (Liso, minuto 46); Pau Sans (Luna, minuto 68) y Azón.
Málaga 0. Herrero; Gabilondo, Nelson Monte, Einar y Víctor (Dani Sánchez, minuto 46) Larrubia (Puga, minuto 81), Manu Molina, Luismi y Kevin Medina; Lobete (Rahmani, minuto 71) y Baturina (Castel, minuto 46).
Árbitro. Lax Franco (colegio murciano) amonstó a Adu Ares, Francho Serrano, Luna y Calero por parte del Real Zaragoza y a Larrubia, Luismi y Dani Sánchéz por parte del Málaga explusando por roja directa a Kevin Medina.
Incidencias. Partido correspondiente a la decimoquinta jornada en la Liga Hypermotion disputado en el estadio de La Romareda con la presencia de 18.054 aficionados en las gradas.
Cada vez que veo a esta banda es la misma historia: flagelo de penitente , dolor de muelas, rechinar de dientes, impotencia, antifútbol, nadie con sentido en el campo y nadie con criterio fuera de él. Todos los equipos que juegan con el RZLLC parecen de superior categoría. Hoy si Poussin no despeja tres venenosos balones 0-3, con uno más, de nuevo. Eso hubiera sido lo más justo. Ah y el Malaga, un equipo sin presupuesto y procedente de 1ª REF, vino sin sus tres estrellas del juvenil que andaban con sus selecciones. Apaguen la luz al salir.
Si Kevin Medina no es expulsado el partido hubiera sido habría sido ganado por el Málaga de calle. Superior técnica y tácticamente en el
campo.
Víctor: Cómo con uno más juegas con dos centrales?.
Futbol tosco, anticuado, impreciso, con jugadores deambulando por el terreno de juego sin orden ni concierto una música estridente y desafinada, mientras el director de orquesta en la banda es incapaz de mover la batuta.
Horripilante ver el desenvolvimiento de una defensa completamente superada con dos estafermos en elcampo como Aketxe y Aguado viendo sin moverse como circula el balón ante sus narices sin intervenir.
El Zaragoza y su afición son, futbolisticamente, lo más parecido a la sociedad española. Traga con todo que le echen.
Infame empate contra 10 55 minutos y el Real Zaragoza confirmo que esta temporada entrara y saldrá de la zona de playoff y finalmente se salvara sin `problemas antes que otras temporadas es la cruda realidad, la plantilla actual no da para más 11 contra 11 volvimos a presenciar un baño de fútbol por parte del Málaga, no son excusa las bajas el rival también las tenía, y apuntar otro pinchazo a la justicia de vestuario volvimos a ver como se hacía un Sanjuan a Bermejo, cualquier jugador con más carácter le hubiese espetado a Víctor sal tu faltaban 20 segundos en el añadido, son pequeños detalles que para el interior de la caseta cuentan y mucho. AUPA ZARAGOZA
No hay que preocuparse. El accionista de PRISA ha colocado a una nueva consejera (según los chicos de Henneo, de hondas raíces aragonesas) en el Club. Todo arreglado.
Tienes razón Maño de Vilasar, que cosicas más raricas pasan este Club.