El terrible durmiente

El Real Zaragoza juega en Oviedo con la obligación de romper la pesada y acostumbrada carga visitante de encajar goles al principio del partido y antes de la media hora

El Cartagena puso el dedo en la llaga en La Romareda: el Real Zaragoza es un equipo que aparece del vestuario pasmado, como recién salido del refrigerador. Nacho en el minuto 4 y Machín en el 14 ya habían puesto al colista con dos tantos de ventaja. Los murcianos habían dado un par de sopapos al Real Zaragoza con el césped casi inmaculado de las pisadas de las botas en un partido que tenía que ganar para no ver comprometida su permanencia. Lo hizo en el descuento, con ese gol de Dani Gómez que completó la remontada con la persiana del encuentro bajándose y desató un electrizante clímax entre afición y equipo.

En casa no tiene la costumbre de ofrecer ventajas tan madrugadoras a sus rivales, pero en los desplazamientos lleva todo el curso pegado a las sábanas mientras le balean antes del desayuno. Este domingo en Oviedo, en su penúltimo viaje de la temporada y con la salvación aún en el aire, juega con la obligación de romper con esa pesada carga que ha hecho que el 41% de las dianas recibidas (13 de 31) se produzcan al principio o antes de la media hora. Sólo en ocho de los 19 encuentros de foráneo ha logrado superar esa frontera de la primera mitad sin recoger balones de las redes de su portería. En el total, sólo Albacete y Cartagena son más descuidados en ese espacio.

Esté déficit se ajusta perfectamente a una notable falta de concentración. A presentarse tarde a la competición. Empezó en Cartagena con un cabezazo de Cédric en el minuto 15 y se ha mantenido en el tiempo como un hábito muy nocivo. Guille Rosas abrió el marcador en Gijón a los 27 minutos; Aarón en el 11 en Tenerife; Juanto Ortuño en el 11 en Elda; Gerard Valentín en el 24 en Huesca; Theo Zidane en el 30 en Córdoba; Mario Soriano en el 7 en La Coruña; Antonio Puertas en el 21 en Eibar; Rebbach en el 23 en Granada; Edgar y Luis Suárez en el 6 y el 16 en Almería, y Carlos Álvarez y Álex Forés en el 6 y el 12 en Almería. En tres ocasiones arrancando por detrás ha terminando imponiéndose (Cartagonova, Heliodoro Rodríguez y Nuevo Pepico Amat), en cuatro empatando (El Alcoraz, Nuevo Arcángel, Riazor y Los Cármenes) y en cuatro perdiendo (El Molinón, Ipurua, UD Almería Stadium y Ciudad de Valencia).

El Real Oviedo no suele afinar tan pronto la puntería en el Carlos Tartiere, donde ha rubricado sólo cinco goles en la franja de la primera media hora. El objetivo es vencer para sumar tres puntos que podrían suponer la continuidad en la categoría siempre que el Eldense no venza en Castalia a la misma hora. Como primer mandamiento, el Real Zaragoza tendrá que desprenderse de su fama de terrible durmiente antes de saltar al campo.

 

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