El Real Zaragoza y el Columbus Crew SC han alcanzado un acuerdo para la cesión del futbolista James Igbekeme al club que compite en la Major League Soccer de los Estados Unidos hasta diciembre de este año. La operación, que se inició hace diez días, se ha cerrado con el nigeriano poniendo rumbo a un destino donde el club espera que madure después de haberse desinflado por completo en el conjunto aragonés.
Hubo una fiebre Igbekeme el primer año que llegó a La Romareda, hace cuatro temporadas de la mano del anterior director deportivo Lalo Arantegui. Hoy, Igbekeme se va a la MLS (Major League Soccer), al Columbus Crew y confirmando que fue un fugaz amor de verano, un fichaje de corte exótico del Gil Vicente portugués que llegó a estar tan considerado que Víctor Fernández hizo todo lo posible para que no saliera traspasado salvo pago de la cláusula. No sucedió y del nigeriano se descubrió que era un centrocampista propenso a la desconexión en el campo, a las lesiones (roturas fibrilares en muslo y aductores, esguince de rodilla…), a momentos burbujeantes con poca trascendencia. Hacía kilómetros pero nunca estaba en defensa ni en ataque, incomunicado deportiva y personalmente (nunca se preocupó de aprender español) en un equipo del que acabó desapareciendo.
Este verano su salida por bajo rendimiento se daba por segura, pero ante la situación con la compraventa y la incertidumbre de los fichajes que se podrían realizar, Juan Ignacio Martínez decidió contar con el futbolista, que se animó ante la enésima oportunidad. Pero Igbekeme juega en otra liga, por calidad más cercana a la Segunda portuguesa, y recayó en un estado de ingravidez del que nunca se había despojado pese a su explosivo estreno en un campeonato donde el Real Zaragoza luchó por la permanencia. Con su marcha, que se une a las de Clemente, Eguaras y Adrián, continúa el lavado de cara de un centro del campo muy caro e improductivo al que han llegado Jaume Grau y Eugeni Valderrama.