Andrés Martín, con 13 goles, 12 asistencias y uno de los mejores regates y disparos, es el futbolista más diferencial de la categoría y lidera un quinteto letal con Vicente, Pablo Rodríguez, Arana y Karrikaburu, autores de 37 de los 50 tantos del Racing y de 27 pases definitivos
Lo tiene todo este fantasisti, término que define en el fútbol italiano la imaginación, por lo general, del trescuartista, ese jugador que agita la chistera entre el centro del campo y la delantera, que imagina diabluras lejos de la portería, las ejecuta dentro de la red y, por el camino, regala flores a sus compañeros. Andrés Martín lidera en el Racing, con sus 13 goles y 12 asistencias, un espectacular quinteto ofensivo formado por Íñigo Vicente, Pablo Rodríguez y Juan Carlos Arana y Jon Karrikaburu. Esos brillantes dobles dígitos, y estar en posesión de uno de los mejores regates y disparos del torneo, convierten al sevillano en el jugador más diferencial de la categoría. El Real Zaragoza, obligado a ganar para huir del descenso, se va a encontrar este sábado en El Sardinero con el Séptimo de Caballería de José Alberto, un grupo de buscadores de oro que han hallado el filón de sus todavía inestables carreras en el equipo cántabro. En La Romareda ya probaron su veneno: dos pases de la zurda de Martín y dianas de Rodríguez y Vicente. Después de empatar con uno más, el conjunto aragonés recibió la puntilla de Aldasoro.
Son autores de 37 de los 50 tantos que lleva el Racing y de 27 asistencias que se reparten de la siguiente forma: Andrés Martín (13+12), Íñigo Vicente (3+8), Juan Carlos Arana (10), Pablo Rodíguez (6+3) y Karrikaburu (5+4). Perdieron la semana pasada en Anduva frente a un Mirandés de granito y han bajado el pistón en las últimas siete jornadas con tan sólo dos victorias en la mochila, pero están a dos puntos del ascenso directo donde han figurado en diez ocasiones incluso como líderes gracias a su tremendo arranque de curso y a la inestimable colaboración de este batallón de artistas del florete para abrir heridas o matar. Este sindicato del crimen cuando se asocia en ataque procede de vientre de la infelicidad. Ninguno de ellos ha triunfado donde soñaba, pero han recuperado la sonrisa del joker en la conjunción de sus talentos. Andrés Martín, esta temporada el director de orquesta, se hizo vistoso en el Córdoba y el Rayo realizó el desembolso más caro de su historia para contratarle, pero en Vallecas se quedó a la sombra de un chico aún por madurar pese a debutar en Primera y participar con la selección sub 21.
Juan Carlos Cordero se lo llevó a préstamo al Tenerife (después intentó traerlo sin éxito a Zaragoza) y, de vuelta a Madrid para otro año frustrante, firmó una segunda cesión al Racing con una opción de compra que los santanderinos ejecutaron el pasado verano tras una larga negociación con el Rayo, con el que había disputado 94 partidos. El 11, capaz de desenvolverse por todo el frente ofensivo con carencia hacia la derecha, ha alcanzado su mejor versión, excelsa, en la ruta que persigue para volver algún día a la élite. Íñigo Vicente era el jefe, en realidad su jerarquía nadie la cuestiona al margen de los números. Producto típico de Lezama, el Athletic sólo le concedió 52 minutos para prestarlo en dos ocasiones al Mirandés de Iraola y después de Lolo Escobar y Etxeberria. En Anduva prolongó su calidad, pero además aprendió a colaborar en un trabajo defensivo del que rehuía y que le había cerrado las puertas de San Mamés. En 2022 rescindió con el equipo vizcaíno para convertirse en el máximo goleador del Racing y en el gran proveedor de pases definitivos en sus dos primeros años, lo que le valió un contrato hasta 2030.
Pablo Rodríguez, un mediapunta canario apodado el Diablo, fue reclutado para cubrir la baja de Peque al Sevilla, una labor nada sencilla. Forjado en los cadetes de la UD Las Palmas, se fue al Real Madrid para proclamarse campeón de la UEFA Youth League y jugar en el Castilla de Raúl González. Con tan sólo 20 años, el Lecce italiano, en la Serie B, puso sus ojos en el habilidoso enganche para participar, casi siempre como revulsivo, en el ascenso a la Serie A, donde sólo tuvo 50 minutos. Brescia y Ascoli, en formato de cesión, fueron sus siguientes destinos. El Racing solicitó su préstamo al club de la región de Apulia, con el que está comprometido hasta 2028, y en El Sardinero ha confirmado su fama de llegador súbito. Juan Carlos Arana, el estilete, siguió una ruta muy similar a la de Rodríguez. De las categorías base de la UD Las Palmas, recaló en la factoría el Madrid, pero cuatro temporadas después firmó por el Atlético y decidir regresar a Las Palmas como trampolín para irse al Villarreal juvenil, con el que disputó la final de la Copa de Campeones, perdiendo contra el Real Zaragoza de Iván Martínez en los penaltis. Sin oportunidades con los mayores, fichó por el Éibar sin que Gaizka Garitano ni Etxeberria lo tuvieron en cuenta, por lo que aceptó una salida al Raging, que, tras firmar 13 goles en su primera experiencia con los cántabros, ejecutó la opción de compra.
Jon Karrikaburu es el quinto mosquetero de esta delantera hambrienta y de herradura en el guante. Hijo de Zubieta, de profesión goleador, ha llegado desde la Real Sociedad para abrirse un hueco en la titularidad. Tras su paso por el Leganés, el Alavés y el Andorra sin que brillara su capacidad rematadora, en el Racing va ganando protagonismo sobre todo desde el banquillo. El Real Zaragoza venció 0-2 el ejercicio pasado, se salvó en ese encuentro perteneciente a la penúltima jornada y colaboró a que el Racing, que tan sólo necesitaba el empate para clasificarse para la promoción, se quedara clavado en Segunda. Tampoco lo pudo hacer una semana después en Villarreal, donde volvió a caer. La historia no se repite, pero se le aproxima. El conjunto aragonés está con el agua el cuello y más tiempo para reaccionar, y a los cántabros parece temblarles las canillas. Eso sí, esta vez con una bestial delantera con el rostro de Andrés Martín frente a una defensa muy, muy vulnerable.
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— Real Racing Club (@realracingclub) March 25, 2025
Agradecerle sus vastisimos conocimientos del quién es quien entre los jugadores rivales.
Su crónica tiene un punto de sadismo. Describe con minuciosidad como puede actuar el matarife del cervatillo Zaragoza, que no león, que nos representa en el escudo.
Todo puede pasar en el futbol, es la grandeza de ese deporte. Una victoria de nuestro Zaragoza allí, sería un gran hito. Pero como pensar eso después de verlos deambular por el campo de esa manera. No se discute que corren y se matan en casi todos los partidos, pero al hacerlo sin orden ni concierto, se cumple la regla de la física, que figura hasta en la publicidad de los neumáticos.
«La potencia sin control, no sirve de nada»
Siempre con el Zaragoza allá donde esté.!!!
La jugada del video muestra talento, mucho talento. Envidia
Gracias Alfonso, este artículo es lo que echamos de menos los zaragocistas, información, periodismo de verdad, no es casualidad la línea de tus opiniones a lo largo de la temporada, o sea rigurosidad y trabajo tu expones y nos dejas absoluta libertad para opinar, un punto en el que me gustaria saber tu opinión, hoy en El Periodico de Aragon se realiza una entrevista al gran Ander Garitano, te lo digo este es el tipo de personas que deberían formar parte de la Secretaria Técnica en el puesto que fuese, profesionales del fútbol con amplia experiencia y con una trayectoria llena de sapiencia. AUPA REAL ZARAGOZA
Garitano es un profesional de rango superior. Cualquier club del mundo agradecería tenerlo en su organigrama
Gracias yo también lo veo así.
La jugada del vídeo es como muchas que se ven en un partido de infantiles y juveniles de DH, nada más lejos de un partido de Champion, que es como se está vendiendo. Lo que veo es al jugador del Mirandes con la camiseta número 10 acercarse al jugador del Racing que hace el pase al que progresa por banda derecha sin rozarle!!!, cuando tenía que haberle hecho contacto físico contundente usando también los brazos para evitar ese pase. En esa acción es posible, incluso, que hubiera caído y, como mucho, hubiera sido falta.