El regreso de Azón al once, de Simeone al equipo y las presencias de Mollejo y Puche dotan al ataque del Real Zaragoza de una furiosa energía juvenil que para intentar tumbar al Sporting
Mollejo es el mayor con 22 años, y su forma de luchar, muchas veces sobreexcitado, le tiene a medio camino entre un chico rebelde y un veterano combatiente. Azón y Giuliano, con 20, comparten un vigoroso carácter ganador y Puche, con 21, espera la ocasión para ser útil desde su perserverante compromiso. El Real Zaragoza, un equipo de marcadores goleadores muy bajos, aún busca todos los equilibrios posibles para elevar su rango competitivo, buscándose en el primer mandamiento, en el rigor defensivo. Sin embargo, con el 1-4-4-2 de Fran Escribá, la aventura ofensiva le atrae y a la espera de si suma o no un regateador en el duro invierno, en Gijón (16.15) tendrá en la delantera del chupete un argumento serio para intentar conseguir su segunda victoria consecutiva a domicilio. La artillería de este generación no brilla por los adornos, pero luce un puño de hierro furioso.
Esa energía juvenil controlada o en estado salvaje podría resultar clave frente a un rival depresivo en los resultados que estrena entrenador en la figura de Miguel Ángel Ramírez, relevo de Abelardo en el banquillo. Escribá procurará que el equipo no se le desmadre porque sabe de los picos de rendimiento de su plantilla, y porque llega a esta cita después de una remontada épica que pudo acabar en tragedia en La Cerámica. Evitar esos contrastes y angustias por muy placenteras que resulten al final es el objetivo del conjunto aragonés, que entre sus planes tiene aprovechar la atmósfera cargada de tensión que se respirará en El Molinón. El control de las emociones se dibuja en la pizarra del técnico.
El regreso de Azón al once es la gran noticia. Destronado Gueye como estrella y como alternativa, el canterano se gana una vez más en su carrera el derecho a la titularidad. Será la proa de ataque de un Real Zaragoza al que vuelve Giuliano, su pichichi, aunque resulta improbable que Escribá lo utilice desde el principio como en Villarreal hizo con el propio Azón. Además, en esa dupla, Mollejo se ha ganado un lugar a base de percutir por fin contra la portería. Los antecedentes de la ilusionante sociedad Azón-Simeone en la alineación tiene tres precedentes sin triunfos, con empates ante Eibar y Oviedo y derrota en Santander. A veces los sueños hay que trabajarlos, y este necesita su tiempo de cocción.
El modelo sobre el que trabaja Escribá es tener a todos alerta pese a que no disimule sus favoritos, coincidentes por otra parte con los de la afición. Por eso surgen las dudas en la línea defensiva con la baja por lesión de Gámez y por los cambios que se producen en el lateral izquierdo por decisión técnica. Larrazabal podría ser el elegido para el lateral derecho, y Lluís López tendría sus opciones de central, mientras que Nieto y Fuentes deberán despejar la margarita en el otro costado. Francés cuenta con papeletas para retornar a su perfil de lateral… Escribá ha jugado esta semana con todo tipo de combinaciones, pero su apuesta, por lo general, es imprimir la mayor lógica posible al equipo. En ese contexto, Francés, Jair y Fuentes no se moverían con la incógnita de un Larrazabal defensor que afectaría al centro del campo, por eso que Francés sea desplazado a un costado y el vasco continúe de extremo es una firme posibilidad. Hagan sus apuestas.
Vada dejará fuera a Eugeni. Ya está para 90 minutos. Alarcón y Francho son inamovibles para Escribá. La medular, una vez más sin Bermejo, tiene los pasaportes repartidos pese a la reincorporación de Grau tras cumplir su partido de sanción y la de Zapater una vez superados sus problemas lumbares. Y arriba, Azón y Mollejo con Giuliano en la recámara para provocar una tormenta eléctrica si fuera necesario. Con Puche siempre dispuesto para sumarse cuando le ordenen a una delantera muy joven que quiere más y que amenaza la inestabilidad del Sporting siempre que el Real Zaragoza consiga un comportamiento general homogéneo, tan sólo con los sobresaltos que origine la generación del chupete.
Me temo lo peor en el Molinón, no está Abelardo que manifestó en la Romareda que ya tenía ganas de jugar el partido de vuelta al que no llegó, pero sus jugadores el domingo pueden hacerle un homenaje, no van a jugar como diga el nuevo mister y sí como saben, y pir las bandas pueden gacernis mucho daño. Los jugadores van a darlo todo por Abelardo y por el nuevo mister dos buenas razones, esperemos no les salga bien, y no nos metan un 3-0.
Hacernos mucho daño. Por las bandas.
Es un partido con perdón para machos, porque los dos equipos, le urgen ganar , y más sabiendo que la Ponferradina ha perdido y quien gane de los dos, ampliará la ventaja en puntos del 4 por la cola si ganase los maños sería a 7 puntos de los de León y si fuese los locales se ponían a seis puntos .
Por eso digo que los dos van a salir a ganar . Que quien va a jugar de lateral derecho , a mi no me gustaría que jugará FRANCES, pero la última palabra la tendrá el mister, creo como dice Alfonso que el centro del campo será FRANCHO, el chileno y creo que el argentino VADA suplirá a Eugeni, y en la delantera creo que jugará el calvo MOLLEJO e IVAN AZON, no creo que ponga a PAPE , pero que puede ocurrir cualquier cosa .