Lunes, festividad de los cobardes

Otro segundo más de silencio de la directiva, haya o no haya algún tipo de operación de por medio que pudiera cambiar la fisonomía de la sociedad, supone la peor de las estrategias hacia un socio, abonado o hincha que necesita hoy mismo sentirse recompensado con la verdad o al menos una porción de la verdad del futuro que le espera al Real Zaragoza

Toda empresa que posee un patrimonio emocional heredado, que en el caso del fútbol es en realidad su principal sustento y su gran argumento negociador para captar atención financiera a nivel privado o público, está en la obligación de hacer un balance al final de cada ejercicio. El Real Zaragoza no pude ser una excepción y mucho menos cuando acaba de cerrar una temporada bochornosa e indecente, cuando una de las principales masas sociales de este deporte a nivel nacional espera una explicación y una autocrítica, pero sobre todo un mensaje inmediato del futuro sea alentador o terrible. Porque si algo merece esta afición es un respeto, que se traduce dadas las circunstancias en un comparecencia pública que aporte algo de transparencia en un contexto de absoluta depresión, desinformación y cobardía por dar la cara.

Este lunes no es un lunes cualquiera. No. La Fundación 2032, más que nunca, debería personarse en la figura de quien sea, pero no tanto para pedir perdón, gesto que se distingue a lo lejos por impostado, sino para mostrar algún rasgo de ese porvenir que ahora mismo está directamente ligado a la desvalorización progresiva, a un nuevo año en Segunda en peores condiciones competitivas. A un club que va a seguir gestionado por quienes han sido incapaces de combatir la deuda con un ascenso y que se han enrocado en ir maquillando ese déficit vendiendo a precio de saldo sus principales joyas. Otro segundo más de silencio, haya o no haya algún tipo de operación de por medio que pudiera cambiar la fisonomía de la sociedad, supone la peor de las estrategias hacia un socio, abonado o hincha que necesita, si es posible, sentirse recompensado con la verdad o al menos una porción de la verdad.

Porque los propietarios, aunque se refugien bajos las siglas de una SAD, son dueños de una empresa en ruina, y su único tesoro tangible es su gente. No hay nada de romanticismo en este en foque. Si decidiesen no acudir al estadio, ni encender el televisor, ni abonarse… ¿qué le quedaría al Real Zaragoza? Ese desapego no va a ocurrir jamás porque el compromiso del seguidor es sentimental, irreductible e invencible. Lo único cierto en este escenario nublado, gris y lento o nulo de reacciones. Ya tarda la Fundación en confirmar a JIM como entrenador aunque tenga contrato en vigor. En agradecer al técnico y a los jugadores su majestuoso esfuerzo por lograr la permanencia y para que cada uno de los consejeros pueda seguir cobrando su suculento sueldo, en algún caso mayor que el de muchos integrantes de la plantilla. Por encima de todo, dirigirse a la afición con cortesía y admiración por su paciencia, por su resistencia y por su fidelidad. Aun así es muy probable que sus palabras de patas cortas hayan perdido ya toda credibilidad. En eso sí ha ganado esta directiva que se esconde más por desidia que por vergüenza.

One comment on “Lunes, festividad de los cobardes

  • Federico , Direct link to comment

    Buenas:
    ¿A nadie se le ocurre salir y pedir una cuestación, una ayuda para que, entre todos, pongamos 20, 50 euros (los que se puedan) y cancelemos la deuda de este club?
    Con el capital humano que representamos, bien podría realizarse.

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