La extrema necesidad del Real Zaragoza en su visita a Burgos (18.30) no contempla otro resultado que la victoria para darle algún sentido al mercado de invierno como principal y casi único motor de la salvación
La visita de hoy a Burgos (18-30), donde se espera una temperatura próxima a los cero grados durante el encuentro, coge al Real Zaragoza congelado en la clasificación. Había entrado un poco en calor con tres victorias y un empate consecutivos pero la derrota contra el Cádiz le ha recordado que sigue en el polo sur de la clasificación, frente a un desplazamiento muy complicado por las características y la buena racha de su rival y por los dos siguientes compromisos que le esperan para cerrar la primera vuelta, Las Palmas y Racing. Un punto podría sacarle del último puesto si el Mirandés pierde ante el el Córdoba (16.15), pero todo lo que no sea ganar, o al menos afrontar la cita con el triunfo como exclusivo objetivo, se debe considerar un mal negocio al margen del tamaño del adversario y de las propias pequeñeces. La exigencia es extrema y sólo la suma del botín completo le daría algún sentido al mercado de invierno como principal y casi único motor de la salvción. Llegar al ecuador de la competición con la media de los 25 puntos establecidos como media para la permanencia es una misión imposible porque a los 16 que tiene debería añadir los nueve que restan. Del 2 de enero al 2 de febrero entrará de nuevo en juego Txema Indias para intentar reparar su desastrosa gestión como director deportivo, porque según dijo Rubén Sellés, para la primera jornada del año no espera refuerzo alguno.
La situación es gravísima y contemplarla desde otra perspectiva desde la propiedad sería una insensatez. Habrá que esperar sin embargo para conocer las auténticas intenciones de los ejecutivos, entre ellos un Mariano Aguilar que seguirá como consejero y asesor de Indias. Para El Plantío, Rubén Sellés recupera a Francho y podrá contar con Tachi y Insua después de una semana con ambos entre algodones y la amenaza de que el técnico tuviera que inventarse un eje defensivo, ya que Radovanovic se ha quedado fuera por sus molestias. Sin lugar a dudas, el regreso del capitán, si está para los 90 minutos, es la mejor noticia teniendo en cuenta su notable estado de forma y su ascendencia en el esquema del entrenador ejerciendo una labor mixta de atacante en la presión y defensor en el repliegue por la banda derecha en la que no estará su amigo Aguirregabiria, lesionado, y repetirá Juan Sebastián con Pomares a la izquierda. Andrada volverá a la portería sin que Adrián haya hecho méritos para ser desplazado al banquillo, todo lo contrario, y Keidi Bare, Guti y Valery completarán la medular. Arriba, Soberón y Kodro, con muy remotas posibilidades para Dani Gómez en lugar del cántabro. El banquillo se enriquecerá con los regresos de Saidu, Akouokou y Cuenca.
El Burgos es una roca con Ramis y en caso de ganar recuperaría su plaza de playoff. Después de vencer en Almería y eliminar al Getafe en la Copa para dejar atrás tres derrotas consecutivas sin haber conseguido un solo gol, ha recuperado el pulso y sigue exponiendo como mejor argumento la dificultad para hacerle un tanto: con 17 dianas en contra, es el segundo equipo del torneo que menos encaja después del Las Palmas. Su rendimiento en El Plantío dista mucho de perfecto en cuanto a resultados y le cuesta un mundo marcar. Sus víctimas han sido la Cultural (al que le hizo 5 de los 9 goles que lleva a favor), el Sanse y el Málaga. Fer Niño, de vuelta la once, Curro, Íñigo Córdoba y David González representan el alma de un conjunto que necesita generar poco para provocar tormentas en el área y que se refugia en la suya con una enorme solvencia en los hombros de Aitor Córdoba y Grego Sierra. Para esta ocasión le falta Atienza, líder en el rol de las coberturas y inicio de la jugada. El Real Zaragoza no puede temblar ni conformarse con salir ileso. Va muy justo de ropa de abrigo en cuanto a fútbol y con jugadores físicamente al límite. Y es colista a dos jornadas de completarse la primera ronda. Tendrá que buscar el fuego en su interior. Como ayer lo hicieron el Andorra para imponerse al Deportivo (1-0) o el Huesca para tener contra las cuerdas al Racing (1-1). El viernes, el Eibar apabulló al Valladolid 3-0).
