Lola Ranera y Fernando Rivarés defiende que lo prioritario es conocer las intenciones de la nueva propiedad del Real Zaragoza y el modelo de financiación y acusan a Azcón de indiscreción premeditada al manifestar sus preferencias antes de la reunión de mañana
Jorge Azcón rompió la baraja de la discreción solicitada por el consejero de Urbanismo, Víctor Serrano, sobre las tres ubicaciones de la nueva Romerada que debería presentar mañana cada grupo municipal del ayuntamiento. La decisión del alcalde de Zaragoza de airear sus preferencias, centradas ahora en mantener el estadio sobre los actuales terrenos, han provocado que PSOE y Podemos decidan abstenerse de comunicar cualquiera de sus prioridades mientras el primer edil no ofrezca información más detallada. «Lo que está haciendo Azcón es vender puro humo. Se fue de la boca y traicionó el acuerdo. Ha empezado la casa por el tejado», ha comentado Fernando Rivarés. Lola Ranera, por su parte, ha manifestado que «el alcalde ha roto las reglas del juego. Los únicos que hemos respetado al consejero de Urbanismo hemos sido los grupos de izquierda. No queremos pensar que juega con las cartas marcadas».
Los dos partidos entienden que el lugar sobre el que se edificaría el campo pasa a un segundo plano y que, sin rechazar propuesta alguna, es necesario resetear el debate. El PSOE estima que lo primordial es conocer las intenciones de la nueva propiedad del Real Zaragoza. «Lo que solicitamos es que estos compradores nos expliquen su proyecto deportivo. Con transparencia, luz y taquígrafos. Cuando nos digan lo que quieren, el ayuntamiento pondrá sobre la mesa de qué forma ayuda al Real Zaragoza para que tenga los mayores éxitos». Podemos, que ha presentado un modelo de Ciudad del Deporte –«con un campo integrado en un auténtico proyecto de ciudad»–, entiende como innegociables tres puntos para la construcción del nuevo equipamiento deportivo. «Que sea en suelo público, con conexión directa con el tranvía y con gestión pública».
«La trampa de la ubicación» (Rivarés). «La liturgia del caos» (Ranera). Los partidos de izquierda titularon su profundo malestar por la anticipación mediática de Azcón que desde el PSOE califican de maniobra política. «Busca rédito electoral, ya lo intentó con la foto con el señor Lapetra. Estamos hablando de interés general. Tiene 16 votos y puede tirar adelante con ellos si quiere porque es legítimo. Nosotros le aconsejamos que deberíamos seguir de la mano y priorizar el consenso». «Pretende responsabilizar a la oposición de un no acuerdo», subraya Rivarés ante la cita de mañana en el consistorio, un encuentro que en principio derivaría hacia un debate mucho más amplio que el previsto con las ubicaciones.
