No hay por qué rasgarse las vestiduras rojiblancas que sobresalen bajo la camiseta del Real Zaragoza. Se ha llegado a este punto por un camino sembrado de inconscientes a conciencia y porque aquellos que en lugar de denunciar las barbaridades sucedidas en el club se han acostado con el enemigo durante una década. Ya no hay marcha atrás. El Real Zaragoza se parece una enormidad a una franquicia del Atético según se extrae de la información facilitada por la plataforma Leon Sepia el 24 de mayo y ratificada ayer, con algún dato más actualizado, por el Periódico de Aragón. Gil Marín controla 4 de los 7 consejeros de la institución, Cruz, Aguilar, Serpa y Cristina LLop; Pablo Jiménez de Parga, secretario del Consejo del Atlético, es el máximo accionista del Real Zaragoza, y pocos de los socios del grupo inversor escapan a la influencia del Fondo Ares Management, cuyos tentáculos alcanzan al equipo colchonero, a Jorge Mas y a Juan Forcén…
La empresa multigrupo que es ahora el Real Zaragoza representa un galimatías para el profano en la materia, perdido en ese laberinto de sociedades entretejidas por un único objetivo: el beneficio económico. Bendecida esta fusión caleidoscopica por el CSD, poco o nada se puede reprochar a quienes han depositado su capital en la empobrecida institución aragonesa, pero hay que evitar los espejismos antes de que lleguen los resultados deportivos. Además de esa alianza con Gil Marín a la cabeza, las sinergias han empatizado por ahora con jugadores de la academia rojiblanca sin conseguir que las auténticas perlas, Riquelme o Camello (tampoco Borja Garcés), fondeen en La Romareda. Tampoco la del Millonarios, el centrocampista Daniel Ruiz, ni la del Lens, el delantero Simon Banza, vendido por cerca de 5 millones de euros al Braga. Desde Florida se espera al central Jairo Quinteros.
Jorge Más, a su paso pontificio por la capital aragonesa, habló del Real Zaragoza como la joya de la corona del nuevo mundo que incluye al Lens, al Millonarios y al Inter de Miami, clubes hermanados desde que se produjo la compraventa. Las conductas, sin embargo, distan mucho de contemplar al Real Zaragoza en un lugar privilegiado de la familia, sino como modesto escaparate experimental, una pasarela de jóvenes cedidos que buscan fortuna lejos del Metropolitano para revalorizarse. Se trata de otra fórmula muy distinta a la acostumbrada y fracasada en los últimos tiempos, la de vertebrar el equipo sobre la experiencia de profesionales de segundo y tercer nivel. El Real Zaragoza, en el vestuario, fluctúa entre la firme apuesta por los canteranos, ese pacto con el amigo atlético y una columna de veteranos. Sin embargo, básicamente, se trata de una plantilla muy similar a la que en las dos últimas temporadas ha peleado por la salvación.
La línea defensiva será la misma siempre y cuando a Cristian deje de darle la lata una vieja lesión que le ha impedido entrenarse con el grupo todavía. En el centro del campo, Grau y Manu Molina, junto a Francho, sí apuntan a aportar algo distinto en la gestión del balón, con la esperanza de que Bermejo insista en esa versión diferencial que ha dotado de inteligencia al juego infantil que le caracterizaba. Y arriba… Mollejo es un guerrillero infatigable, pero el gol, con Azón en la sala de espera por si hace falta operar, continúa pendiente de un atacante que no puede ser cualquiera porque Giuliano Simeone ha venido a hacer su erasmus particular. La afición, que a este ritmo de fidelidad extrema se aproximará a los 25.000 abonados, es prácticamente el último refugio sentimental de un Real Zaragoza que quiere recuperar su identidad mientras vive con idéntica expectación e incertidumbre bajo esa segunda y gruesa piel del Pupas.
Respuesta: Atlético Zaragoza B. Desazonadora información la de ayer de El Periódico de Aragón. Hay que darle las gracias a la Fundación, esa gente de gran corazón zaragocista.
Para Luceni: perfecto el resumen que has hecho.
¿Y la pantomima de la berlanguiana visita de Jorge Mas? A ver qué dicen ahora Lambán y Azcón, que lo recibieron…¡Qué triste!
Sí, pero lo peor de todo esto es la cuadrilla de correveidiles/gacetillas «ilustres» (vaya tela) que sólo saben bailarle las mentiras y las «gracias» a todos los prebostes del Zaragoza. ¡Qué patéticos son los medios deportivos de Zaragoza, en general y qué vendidos, empezando por la RTVA!!