Sainz de Varanda va a seguir, o no

Son muy listos, o no. Llevan la operación de la compraventa con arte negociador, o no. Va a ocurrir algo con la transacción de títulos, o no. Todo se va a aclarar en los próximos días, horas, minutos o segundos, o no. Esto va a acabar como el rosario de la aurora, o no. Miguel Torrecila va a terminar con una camisa de fuerza, o no. Son los hijos de Cándido, o no. A un mes exacto de que comience la competición, el club sigue en manos de la Fundación pese a que César Alierta dijera a sus más íntimos que tenía todo resuelto, horas antes de que su sobrino Fernando Sainz de Varanda y su sobrio adoptado Christian Lapetra tuviesen la amabilidad de informar por primera vez, como «era público y notorio (para ellos, claro)» que había abierto un proceso de cambio accionarial en la entidad y que se iba a resolver en breve. O no. En esa informal rueda de prensa en mangas de camisa, el presidente y el vicepresidente, que acudieron a dar la bienvenida a la plantilla y al nuevo utillero y a recordar que Paco Checa ha dejado de ser secretario general, mostraron un talante de absoluta normalidad, que es la que reina, dijeron, en un club que de momento tiene a sus empleados sin cobrar la pasada mensualidad; que no ha preparado campaña alguna de abonados con la excusa del aforo que permita el Gobierno aragonés en La Romareda y que cuenta con una plantilla en la que los grandes protagonistas son los chicos de la cantera a falta de fichajes. Esa nueva normalidad pone los pelos de punta mientras reina un silencio sepulcral no solo desde las oficinas, sino también desde la prensa, que han echado el freno de mano a cualquier referencia al tema hasta que no se produzca un comunicado oficial. O no. El secretismo, una vez destapado por los propios interesados aunque a su manera que para el acuerdo falta solo la firma, tiene dos caras: la seguridad o el pánico. El reloj que marca las horas de este asunto no mueve sus agujas, pero Sainz de Varanda ya ha comentado off the record que él va a seguir en el club ocurra lo que ocurra. O no. O quién sabe si la parte alta del organigrama viene incluida en el pack de la compraventa que se confirmará mañana o en el mañana, cuando todos los flecos de la Fundación estén resueltos. Menuda manera de salir la de los prohombres de la ciudad. O no, por lo menos Sainz de Varanda.