El Racing, con el fútbol ofensivo más atractivo de Segunda, examina antes de la apertura de las Fiestas del Pilar a un Real Zaragoza corto de centrales
Dos horas y media antes de que Naiara y Juanjo, participantes zaragozanos del popular ‘reality’ televisivo ‘Operación Triunfo’, comiencen la lectura del pregón que abre las Fiestas del Pilar (21.00), el Real Zaragoza recibirá en La Romareda al Racing de Santander (18.30), el equipo con el fútbol ofensivo más atractivo de la categoría. El toro de fuego de José Alberto examinará la capacidad del conjunto aragonés de superar dos pruebas de un calado estimable ante una afición que vestirá de gala el estadio para, después, llegar puntual al gran momento del día bajo el Ayuntamiento: reponerse de la derrota frente al Sporting y rearmarse en defensa con el debut obligado de Kosa después de que Lluís López y Clemente fueran expulsados en El Molinón. No hay más centrales en caso de emergencia, por esa cuestión y porque el eslovaco no está al cien por cien tras superar un proceso gripal, Víctor Fernández citará a Jair, un futbolista con el que no cuenta pero que podría ser llamado a filas durante el partido si ocurriera una urgencia. Algo no se ha hecho bien en esa línea a la que regresará Tasende.
Para ambos está en juego, siempre que Levante y Burgos lo permitan, uno de los puestos de ascenso directo e incluso el liderato. Los cántabros cosecharon su primera derrota cuando atacaban la cima de la clasificación para hacerse fuertes, pero el apurado Cartagena de Jandro se lo impidió en El Sardinero (1-2). Los dos equipos han dejado ver sus mejores y sus peores versiones, si bien desprende el Racing un aroma más fuerte a amenaza frente a un Real Zaragoza que lo mismo se ilumina con un juego de valiente iniciativa que sufre un apagón. En esta categoría en la que los 12 primeros están agrupados en cuatro puntos de diferencia, puede suceder cualquier cosa, por lo que el papel de favorito, al menos de inicio, se lo reparten por partes iguales. Lo que no sería conveniente es que los locales entrarán en un intercambio de golpes, territorio que el Racing maneja con maestría con futbolistas con calidad en la conducción del balón, las asociaciones a toda máquina con furia vertical y una habilidad especial para descubrir todo tipo de pasillos interiores. Atrás no lo pasa bien, y menos si pierde el balón, herramienta de que suministra su plan atacante.
Cortocircuitar esa corriente es uno de los objetivos de Víctor Fernández. La batalla por el centro del campo se antoja esencial para impedir la superioridad que suelen establecer Vencedor y Aldasoro de anclas y Pablo Rodríguez, Íñigo Vicente, Andrés Martín y el incombustible Arana en un baile de posiciones armonioso y letal. En un principio, un cambio de sistema para blindar esa zona parece lo más conveniente, pero el entrenador parece reacio a cambiar su marca personal y todo indica que Moya y Francho, con Liso por la izquierda y Aketxe por la derecha, deberán apañárselas para superar y mejorar a ese torbellino. El pulso de calidad está servido, queda por descubrir quién gana en la parcela física, fundamental en un encuentro que va a exigir un ritmo considerable. No será menos interesante descubrir si Víctor devuelve a Soberón y sus cinco goles a la titularidad junto a Bazdar o, por cuarta jornada consecutiva, apuesta por Marí en el once. El pichichi no le convence, pero otra suplencia del delantero en su actual estado de forma se interpretaría como un ‘aquí estoy yo’ del técnico, que durante esta semana no ha encajado muy bien las críticas de la hinchada y de la prensa.
De Kosa, que debutará en la alineación tras los minutos que tuvo en El Plantío, Víctor no quiere adelantar lo que espera de su rendimiento. Leyó una serie de virtudes del eslovaco pero advirtió que mejor no levantar grandes expectativas por el momento. La defensa más segura del campeonato después de la del Mirandés (sólo ha encajado cuatro tantos) estrena un futbolista que venía para fiel compañero de Vital y que ha tenido que esperar a que Lluís López cometa una imprudencia para hacerse un hueco. Jair estará en el banquillo con muy pocos entrenamientos una vez recuperado de su problema en el ojo… La operación triunfo del Real Zaragoza, aunque parezca mentira por su buen comportamiento a ratos y por su excelente lugar en la tabla, tranquilizará una atmósfera algo inquieta. Necesita seguir intocable en casa contra el mejor visitante (tres triunfos a domicilio) para tener las fiestas en paz.