El entrenador del Real Zaragoza ha sido taxativo cuando se le ha cuestionado sobre su futuro, que parecía condicionado a lo que ocurra este sábado en Valladolid, al afirmar que desde la directiva no se la sugerido nada al respecto, además de afirmar que no se produjo ningún tipo de cónclave tras la derrota frente al Amorebieta. Según el técnico, ni existió esa reunión ni ha recibido ultimátum alguno.
Posible destitución: «No hubo ningún tipo de reunión y no me trasmitieron nada. Se inventó. Hay máxima confianza en nuestro trabajo. En lo referente al grupo, hemos ido de menos a más en el aspecto emocional después del palo del otro día por cómo fue esa derrota. Con el paso de los días hemos relativizado las cosas. No enfoco el tema en esa dirección. No entró en ese ruido ni en esa dinámica. Me centro en mi trabajo y en el rival».
La clave, la derrota con el Cartagena: «Se ha generado de una corriente motivada por el partido del Cartagena. Cogimos el equipo para mirar hacia arriba con poco margen de equivocación y estábamos expuestos a sumar permanentemente. En dos partidos que se tenía que haber ganado no se hizo. Merecimos vencer al Cartagena, no lo hicimos y eso generó una negatividad agudizado en el empate en Villarreal que no fue tan malo y asumir el partido contra el Amorebieta, que lo afrontamos con ansiedad. Se jugó con ciertos miedos que condicionaron el rendimiento individual y colectivo».
Sin preocupación por la posición: «En seis temporadas el Real Zaragoza ha quedado en el 13º puesto o por debajo. Hay una gran dificultad, pero son circunstancias. Si hubiésemos ganado a Cartagena y Amorebieta estaríamos a punto de. No debemos mirar más allá de mañana».
Los 50 puntos: «El objetivo es el Real Valladolid. Esta categoría no te aburre. O luchas por arriba o por abajo. En Segunda, nadie queda en tierra de nadie. Vamos a por los tres puntos, por qué no, que sería mucho mejor. Intentaremos quedar lo más arriba posible. Este equipo antes o después volverá a Primera, pero tiene que haber un proceso y un proyecto coherente».
Mensaje a la afición: «Nos gustaría estar en un posición más confortable. Pero la categoría es como es. No soy nadie para pedir nada sino ofrecer y desde ahí conectar con la gente».
Se ha nombrado el ascenso: «Hay otras personas de analizan y emiten lo que deben en cada momento. Nosotros nos encontramos con un escenario y hemos sido consecuentes en focalizar el trabajo en cada semana. Yo no me he salido de esa línea».
La plantilla: «Pienso que hay potencial para estar más arriba. Pero todo está condicionado por las bajas que hemos tenido desde que llegamos, como ocurrirá mañana. Este plantel está perfectamente capacitado para estar más arriba que abajo».
El caso Fran Gámez: «Va ser titular mañana. Estamos muy contentos con él. Ha dado un rendimiento muy bueno con nosotros. El día del Sporting no podía competir y después ha habido un compañero (Zedadka) que nos está aportando».
Francho y Bakis: «No es opción para mañana pese a su buena evolución. Bakis tenía la esperanza de que hiciera algo con el colectivo esta semana pero no ha sido posible. La semana que viene lo hará de forma progresiva».
Valladolid: «Siento Valladolid como mi ciudad. Es un equipo que viene de otra categoría y su objetivo es el ascenso directo aunque ahora no esté dentro de él. Es un bloque redondo con jugadores de los más diferenciales de la categoría. Está muy bien conformado e imagino que mañana habrá exigencia por nuestra parte. Ellos pensarán sólo en ganarnos en un estadio difícil. Aun así vamos con buena mentalidad y a dejarnos la vida por una victoria».
Parece que este hombre piensa, al igual que la propiedad, que la afición zaragocista es conformista y traga con todo….lo peor es que, en esto, tienen razón, por desgracia