«En la gestión del equipo he aprendido que el éxito sólo es alcanzable con una exigente disciplina de trabajo». Esta es la frase que encabeza la página web personal de Juan Carlos Carcedo, el nuevo entrenador del Real Zaragoza, una sentencia que define a la perfección la personalidad de un entrenador curtido en un segundo plano mediático pero con enorme peso en la metodología de trabajo en la carrera de Unay Emery, el técnico con el que ha compartido 14 temporadas de éxito y títulos a nivel nacional e internacional hasta que ambos separaron sus destinos: el vasco en dirección al Villarreal y el riojano camino de Ibiza, donde se estrenó como primer espada con un ascenso a Segunda.
Estamos frente a un profesional con un ingente arsenal de conocimientos que dedica el mayor porcentaje de su trabajo a la faceta táctica, a que no se le escape detalle alguno, con los entrenamientos y los partidos muy estructurados y una exigencia máxima a sus futbolistas para que capten sus ideas y las plasme en en el campo con escaso margen para la improvisación. Persigue y consigue que sus equipos estén siempre organizados. Esa incidencia en el orden y la armonía no le impiden un margen para la flexibilidad, a la hora plantear situaciones con cuatro o cinco defensas en función de los rivales y las circunstancias. Sin duda un técnico muy diferente a Juan Ignacio Martínez, sin la experiencia del alicantino pero con una preocupación y dedicación diaria por mejorar desde la vertiente más científica del fútbol sin obviar la evolución del individuo como parte fundamental del engranaje,.
Entrenamiento con el ARSENAL
Entrenamiento con el PSG
