La presentación de Juan Carlos Carcedo como entrenador del Real Zaragoza hasta 2024 dejó, entre las palabras del nuevo técnico y sus pensamientos, la confirmación de Miguel Torrecilla como director deportivo de futuro. Raúl Sanllehí, en su primera comparecencia pública y destacando todos los valores humamos y deportivos («honestidad y capacidad de formar jugadores jóvenes») de alguien que conoce bien desde la etapa de ambos en el Arsenal, agradeció al entrenador que se haya decantado por el club aragonés y entregó la vez y la voz «a Miguel, que para eso es nuestro director deportivo», para que glosara la figura del técnico y las causas por las que ha sido elegido para el proyecto.
Carcedo, en su charla con los medios y en el apartado correspondiente a la configuración de la plantilla, comentó que están manos a la obra. «Ya estamos en ese proceso con Miguel». El entrenador era el gran protagonista, pero el director deportivo halló su espacio en ese contexto para ser reelegido por alusiones en su puesto a la espera de la renovación oficial de su contrato que finaliza el 30 de junio. Su primer pensamiento fue para JIM. «Dar las gracias a Juan Ignacio Martínez desde un reconocimiento infinito». Del nuevo conductor de la plantilla destacó que «lo más importante y lo que nos ha llevado a dirigirnos hacia él es su ambición y su modelo de juego. Nos aporta mucho conocimiento y nos gusta su manera de querer ganar los partidos, su capacidad camleónica. Busca ser ser protagonista con el balón, no especular, con bloque alto y que vuele el balón». Torrecilla finalizó su intervención dirigiéndose al presentado con esa épica tan doméstica que le caracteriza. «Aquí en Zaragoza hay un lema: Zaragoza nunca se rinde y les aseguro que Carcedo tampoco lo hará».
El entrenador, después de dar las gracias a Jorge Más y el grupo inversor por haberle seleccionado, explicó, por qué el Real Zaragoza cuando tenía otras ofertas muy en firme: «Ha sido decisión muy fácil. Teníamos otras opciones, pero al recibir esta llamada te olvidas de todo lo demás porque es la propuesta de un club histórico a nivel europeo y porque su forma de entender el fútbol se acopla perfectamente con nuestra forma de interpretarlo. Además sabemos lo que es y significa La Romareda, su afición, una de sus grandes armas que ahora disfrutaremos como locales».
El ascenso se ha convertido en una quimera y una obsesión después de, con la próxima, diez temporadas en Segunda. El objetivo que marcó Jorge Mas es luchar por subir para huir de esta pesadilla. El técnico riojano cree que esa meta es posible siempre que se afronte «con trabajo, constancia, humildad y sabiendo la dificultad de la categoría. Es una liga con muchas rachas, y por eso hay que disponer de un proyecto y tranquilidad para la maratón que nos espera. Este proyecto es sólido, viene a quedarse, y esa fue una de las grandes razones que nos animó a venir». Carcedo entiende que toda su energía ha de enfocarse en la ambición que le reclama este club y su gente. «Buscaremos que la afición se sienta orgullosa y que observe que nos sentimos orgullosos de llevar esta camiseta. Quiero un Real Zaragoza valiente que represente estos colores y al zaragocismo«.
La cantera es otra de las prioridades de los nuevos gestores del club, que han acelerado, a través de Sanllehí, las negociaciones abiertas con Francés, Francho e Iván Azón para mejorar sus respectivas situaciones contractuales con el club a nivel deportivo y económico. «Conozco muy bien a los jóvenes. Tienen que ser la base. Es nuestra fuerza. Uno de nuestros trabajos sea sacar jugadores de la academia como ya hicimos por ejemplo en el Arsenal. Hay que construir en base a ellos y reunirlos alrededor de gente que conozca la categoría. Ojalá que tiren la puerta» Su reto se circunscribe al aquí y al ahora. «Soy un privilegiado. Hago lo que más me gusta y ahora me toca hacer frente a una aventura muy bonita. Podemos conseguir cosas, pero el reto está en el día a día».
Recemos que salga bien, con Torrecilla de tandem. Recemos…y mucho