Cada semana que pasa se mira el parte médico, o, en su defecto, si el jugador aparece cerca del grupo en los entrenamientos, para comprobar la evolución de su lesión en el bíceps femoral del muslo derecho. Se esperaba que Iván Azón pudiese entrar en la lista contra el Burgos, pero su regreso ha quedado paralizado y sin fecha aproximada para su vuelta después de que el club haya informado que mantiene todavía unas molestias en la zona lesionada. «Una resonancia de control realizada recientemente que la dolencia no está resuelta todavía, por lo que sigue trabajando en el plan diseñado por los servicios médicos para conseguir una total recuperación», informa la página web zaragocista.
Por lo que se refiere a Cristian, la otra pieza de valor de la plantilla que sigue en la enfermería, el Real Zaragoza ha comunicado que «el portero evoluciona favorablemente de su lesión del codo según confirman los controles a los que ha sido sometido. Por el momento sigue con la ortesis que inmoviliza dicha articulación y que deberá llevar al menos una semana más, continuando con el tratamiento fisioterápico y trabajando de forma individualizada en el gimnasio». El guardameta tiene por delante aún un proceso largo de recuperación y se prevé que no pueda reaparecer hasta principios de 2023. Ratón y Rebollo seguirán optando a la portería en ausencia de su compañero.