El presidente del Real Zaragoza, con su habitual desconexión del club, se desmarca de los discursos moderados de Indias y Gabi y asegura que el objetivo es el playoff y el ascenso
Cada día cuesta más encasillar a Jorge Mas en el Real Zaragoza. Aparece en el organigrama como presidente pero ejerce de virrey desconectado física y administrativamente de una colonia, el Real Zaragoza, que representa como rostro de la multipropiedad. Un rostro parlante, para desgracia y burla del club, que tiene en el cargo a un personaje sin más vínculo que el protocolario. Ayer, al acabar el encuentro de octavos de final del Mundial de Clubes en el Mercedes Benz de Atlanta entre su Inter de Miami y un PSG que demostró que la MLS sigue siendo un cementerio de elefantes, se puso delante de los micrófonos de la Cope en el programa Tiempo de Juego para soltar lo que le sale por la boca con su entonación cubana y algodonada.
Como por lo general tiene apagado el radar deportivo de lo que sucede en el Real Zaragoza, volvió a patinar, desmarcándose de los discursos moderados de Indias y Gabi y señalando el playoff de ascenso como objetivo para la próxima temporada. «Tenemos un nuevo director deportivo, el Txema Indias, y estamos en la labor de rearmar en este ventana el equipo que se merece Zaragoza con el objetivo y la ambición de llegar al playoff para llegar a Primera». Es el Guasón del grupo inversor y no lo sabe ni le importa. Los periodistas le sugirieron, en tomo jocoso, que podría traerse a Messi, a lo que contestó entre risas: «Es el sueño de todos los maños, ja, ja, ja». Una pesadilla escucharle.
Si su mensaje procediera de un personaje creíble desde que hace tres años apareciera por la capital aragonesa a lomos del corcel de Amber Capital, es posible que su discurso se reconociera como el de alguien merecedor de un respeto, de alguien que contempla el Real Zaragoza como una institución que siempre ha de plantearse los mayores retos pese a las dificultades. Ahora bien, su voz denota un absoluto oportunismo y, sobre todo, una desinformación mayúscula para enlazar con el plan del entrenador y del director deportivo, quienes se han encargado de rebajar expectativas en función de las limitaciones económicas y de una política que sin descartar metas de altura las observa con el fruto de una labor de ajustes y reajustes. De tiempo, paciencia y toma de conciencia de una categoría que presenta muchos aspirantes y enormes obstáculos. Jorge Mas es una veleta que gira sin saber por dónde le da el viento.
«El Real Zaragoza es la joya de la corona». «Queremos ascender ayer». Estas perlas, engarzadas en tres temporadas de sonoros fracasos, definen a un empresario que visualiza el club aragonés como una pesada carga, un segundo plato que le han puesto en la mesa sin pedirlo. «Francamente vivimos un año muy difícil que nació desafortunadamente en la ventana del verano del año pasado. No se hizo una buena labor, pero ahora vamos a a asegurarnos de montar una buen plantilla no sólo para competir sino por el deber que tenemos con Zaragoza. Yo siempre he dicho que, con las limitaciones que impone la Liga, vamos a poner las mejores herramientas para hacer el mejor club que podamos». Ja, ja, ja. Maldita la gracia.
Este personaje cada día se supera aunque parezca dificil, una máxima en la vida es que hay veces que nos convertimos en lo que más hemos odiado, este es un claro ejemplo, ha traspasado barreras y ahora ya insulta a la inteligencia de los aragoneses, un dictadorcillo caribeño, mira taruguico en esta tierra milenaria hemos pasado muchas vicisitudes, conocemos de sobra a prebostes en un balcón vociferando «Haremos un puente» todo el populacho apladuiendo con fruición y a continuación preguntandose para que queremos un puente si no tenemos ni un riachuelo, baboseas y corres como un pavo real ante medios de comunicación nacionales, para nuestra tierra te reservas el «Alo Presiente» claro que reflexionando una entrevista con los medios que todos los aragonese pagamos resultaría un pastel demasiado edulcorado , como indica Alfonso has dejado de hacer gracia para producir arcadas si arcadas, entiendo has llegado de servilleta a mantel y no lo has digerido bien, no hay nada más hortera, zafio, burdo y chabacano que los manteles Low Coast, llegará un día que se cumplira la máxima de la vida, se puede engañar a muchos poco tiempo, a pocos mucho tiempo pero no a todos todo el tiempo, la sociedad aragonesa se levantara y pagarás tus desmanes y la humillación y el caminar por el lodo al que has llevado a una institución aragonesa el REAL ZARAGOZA.
El silencio nos haría cómplices.
Si el señor Hernández considera guasón tal y como lo consideran en Iberoamérica, podríamos emparentarlo al personaje del «joker» de la película «el caballero oscuro». Un personaje nihilista que encuentra placer en la destrucción.
Pero nada está más lejos de la realidad con este presidente. No está al margen de la sociedad como el personaje, está íntimamente imbricado con las estructuras de ésta; su deseo de destrucción es con el fin de rapiñar a costa de lo que sea junto con sus «respetables socios inversores» y, después, levantará el vuelo y dejará el paisaje de desolación. Así entienden ellos la «destrucción creativa» de schumpeter.
Una vez idos, los voceros se ocuparán de pastorear al pópulo con alguna fábula.
En definitiva, «circulen, no hay nada que ver».
Este llamado presidente juega con los sentimientos de todo un pueblo , si me lo encontrara cara a cara le diría cuatro cosas con toda educación del mundo, vamos a peor y menos palabras y más hechos, de la actual plantilla sobran 18 jugadores que los coloque en sus equipos cedidos o traspasados entonces sí que veríamos algo de interés y sobre todo poner dólares o euros para fichar jugadores diferenciales pero todo eso no va a pasar porque ni tan siquiera HAN PAGADO EL PRIMER PLAZO DE LA NUEVA ROMAREDA y el resumen es POR LA BOCA MUERE EL PEZ
Que este sujeto tenga el cargo de Presidente dice todo sobre la consideración que tiene la multipropiedad del Real Zaragoza. Y la cuadrilla de los Forcén y cía (para cuándo un artículo sobre este siniestro personaje) tan a gusto.