De todas las segundas vueltas de las 9 temporadas en Segunda, con los 26 puntos actuales solo una similar a la disputada con el técnico vasco en el banquillo permitiría alcanzar la promoción. Dos de ellas lindarían con el descenso
La primera vuelta le ha dado al Real Zaragoza para sumar 26 puntos, la peor cuarta cosecha en 21 partidos desde el descenso del 2013. Su meta, ahora mismo, es trabajar lo que resta de campeonato para no sufrir una vez confirmado por el propio Miguel Torrecilla que por el mercado de enero se pasará de largo de cualquier puja relevante para reforzar la ajustada plantilla. Para un nuevo milagro made in JIM, en esta ocasión clasificarse para el playoff, el conjunto aragonés necesitaría 39 puntos más para alcanzar los 65 de media que podrían dar derecho a la sexta plaza, puesto de promoción. Casi el 62% lo que se pondrá en juego a partir del 2 de enero en Anduva.
La dificultad es monumental, pero tiene un precedente. Eso sí, con un Borja Iglesias que a estas alturas ya llevaba 9 goles y que acabaría en los 22 y un Cristian Álvarez en su máximo esplendor. Fue la temporada con Natxo González en el banquillo. El Real Zaragoza se plantó en el parón navideño de 2017 a 10 puntos de los mejores (el Granada era sexto con 34 puntos) y a tres del descenso, con el técnico teniendo constancia de que sus días estaban contados como hizo saber a su familia, que en diciembre comenzó a preparar una maleta de viaje que no facturaría sin embargo hasta el 30 de junio. La reacción resultó brutal. Esta hazaña se explica desde la cantidad de victorias, 15, que el equipo logró en 21 jornadas. El desenlace final, la eliminatoria por el ascenso, acabó en drama con el gol de Diamanka para el Numancia en La Romareda.
47 puntos en la segunda vuelta del torneo. El Real Zaragoza de JIM no necesitaría esa barbaridad, pero sí aproximarse mucho. Si su comportamiento es el mismo o parecido al resto de los cursos que lleva en Segunda, le será imposible ni mirar de cerca la antesala del cielo de la clasificación. El año pasado se consiguieron 30 puntos para confirmar la continuidad en Segunda, toda una conquista liderada por el entrenador alicantino. Con esa misma cifra, 30, dio para hacerse con la sexta posición en la campaña 2014-2015, la de Ranko Popovic, pero se había llegado al ecuador con 30. Con 61 puntos, la exigencia más baja en Segunda, el Real Zaragoza disputó la final por al ascenso frente al Las Palmas. Su primera gran frustración en sus intentos por regresar a la élite. Con Víctor Fernández a los mandos, el equipo aragonés redondeo 65 en total con los 32 de la segunda vuelta para caer en la promoción con el Elche de Nino y Pacheta.
La 2015-2016, la del escándalo de Palamós, consiguió 33 puntos en la segunda ronda del campeonato que añadió a los 31 de la primera. Se evitó la tragedia con Víctor Fernández en la 2018-2019 después de arrancar con 22 ese tramo de la competición y lograr otros 29. Con los 21 del curso 2013-2014 y los 23 del 2016-2017, el Real Zaragoza se iría a 1ª REFF o se quedaría muy cerca. El macrosueño del ascenso ahora mismo sólo es posible con una segunda vuelta como la que protagonizó el equipo de Natxo González. Con un poco menos, también sería posible.
