La afición contra lo inexplicable

Los errores provocados por los árbitros interpretando las imágenes del VAR son cada vez más evidentes y comentados por los aficionados y los medios de comunicación. La eterna lucha entre el Real Madrid y el FC Barcelona, que ahora se maneja como arma política en esta deriva del independentismo, ocupa muchos minutos de radio y televisión además de estallar en las redes sociales. Una buena forma de disminuir la atención sobre el descalabro político de este país que está destruyéndose a sí mismo.

El espectáculo del viernes con motivo del aplazamiento del partido en la Romareda fue inexplicable. Ya se había advertido de la nevada que iba a caer en Zaragoza por la Agencia Estatal de Meteorología y, pese a todo, se intentó jugar el encuentro. Comunicados desde el Ayuntamiento a la ciudadanía para que no salieran de sus casas y cierre de diferentes líneas de autobuses no fueron suficiente para que entrasen cerca de un millar de personas tras la apertura de las puertas. El árbitro esperaba órdenes, el mini tractor y los empleados del club con sus palas dejaban al descubierto el dibujo del terreno de juego y los responsables del Andorra insistiendo en que el partido debía disputarse; las redes sociales del Real Zaragoza sin decir nada durante más de tres horas hasta que salió una nota oficial comentando que podría suspenderse el partido. Los jugadores mirando desde las gradas, los informadores en la sala de prensa, las cámaras de TV que eran las mismas que debían utilizarse en Cornellá al día siguiente… Y pasada la una de la madrugada la decisión de la jueza comunicando que el partido se disputaba el sábado a las cuatro y cuarto. Afortunadamente se ganó y se sumaron los tres puntos con una acertada actuación de Badía.

Se supo después que la meniscopatía de Bakis iba por buen camino y que Enrich contaba con la confianza del cuerpo técnico, además de ser efectiva la recuperación de Azón. Solamente queda que Cordero acierte para fortalecer la plantilla. Y mientras tanto, pase lo que pase, la afición sigue adelante. Las entradas para Alcorcón fueron compradas el primer día de su puesta a la venta y se cree que, si se gana en Santo Domingo, la lucha será para el playoff. Espero que los jugadores sepan responder a la fe del zaragocismo.

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